La ELAM, un baluarte para la integración latinoamericana

Fragmento

Cada 12 de octubre, en América y España, se celebra el “Día de la Raza”, fecha que conmemora la llegada de la expedición española comandada por el genovés Cristóbal Colón al continente americano. Este suceso marca el inicio de la conquista y colonización posterior de América por Europa Occidental abierta por españoles, portugueses, holandeses, franceses e ingleses. Existen diferentes criterios alrededor de las características, consecuencias y repercusión que tuvo este proceso en los habitantes del continente americano y, a la vez, en el devenir de su historia. Es cierto que estuvo marcado por la brutalidad, imposición violenta, matanza y esclavización de las poblaciones originarias, el saqueo y el agotamiento de muchas de sus riquezas, pero es innegable e irreversible el papel que corresponde a Europa Occidental y sus conquistadores en el proceso de mestización en el que confluyen los hijos de nuestra América actual. El 12 de octubre de 1492 es uno de los momentos cumbres de la historia universal, significa el encuentro de dos mundos, de dos culturas, dos civilizaciones desarrolladas en lugares y condiciones diferentes, con rasgos y costumbres desconocidas entre ellas, pero por encima de todo, con la ignorancia mutua de sus existencias. En la historia, este momento se ha denominado como el descubrimiento de América por los españoles, lo que desde una posición más conciliadora significa la unión entre dos civilizaciones, y el ulterior y recíproco intercambio de sus tradiciones, costumbres y visiones del mundo. Esta revelación, permitió a las poblaciones originarias apropiarse de un legado cultural de adelantos y expresiones artísticas distintivas de Occidente, a la vez que los colonizadores percibieron e hicieron uso de la riqueza no solo natural, también cultural de los nativos del “nuevo mundo”.

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2012-02-22   |   815 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 7 Núm.1. Enero-Abril 2012 Pags. 48-49 Panorama Cuba y Salud 2012; 7(1)