Fragmento

Editorial número 4(1) de la RVP Desde los tiempos de Gall, Broca y Wernicke, la neuropsicología ha venido ganando un amplio terreno en las demás áreas clínicas de la psicología, no solamente con sus aportes que han permitido la integración entre ramas alejadas como son la neurología y la psicología, sino que han servido de ejemplo en lo que refiere el romper barreras innecesarias en los campos aplicados de la disciplina. Así, tal es el caso de la diferencia entre facultades y la misma redefinición de la mente la cual se ha entendido como un conjunto de capacidades y funciones cerebrales que determinan en última instancia el comportamiento (Segui, 2003); no obstante, es interesante agregar el surgimiento del modelo localizacionista de la mente, el cual cobró posteriormente un amplio auge con los trabajos de Broca y Wernicke acerca de las lesiones en el hemisferio izquierdo y las zonas específicas encargadas de la producción y capacidad verbal, sin contar eso sí con los aportes de Harlow o Alzheimer, entre muchos otros.

Palabras clave:

2013-10-28   |   889 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 4 Núm.1. Marzo-Septiembre 2013 Pags. I-III Rev Van Psicol Clín Teór Pract 2013; 4(1)