Autores: López Yúrika Paola, González Naranjo Luis Alonso, Restrepo Escobar Mauricio, Rodríguez Padilla Libia María, León Alba Luz, Severiche Maury David Moisés, Garcia Moreno Luis Fernando, Vásquez Duque Gloria María
El compromiso renal en el lupus eritematoso sistémico (LES) es uno de los mayores determinantes del curso y pronóstico de estos pacientes. Existe evidencia de la asociación de anticuerpos anti-C1q y el desarrollo de nefritis lúpica. El objetivo de este estudio fue determinar la prevalencia de anticuerpos anti-C1q y su asociación con nefritis lúpica en pacientes colombianos con LES. Métodos: Estudio de corte transversal en el cual se incluyeron 80 pacientes con diagnóstico de LES según criterios del Colegio Americano de Reumatología. La cuantificación de anticuerpos anti-C1q séricos se realizó por ELISA, se consideraron positivas concentraciones ≥15 U/ml. Resultados: Los pacientes eran predominantemente mujeres (87%) y 43,7% tuvieron proteinuria >0,5 g/día, la cual fue más común en pacientes jóvenes y apareció tempranamente en la enfermedad. Cuarenta y cuatro (55%) de los pacientes tenían anticuerpos anti-C1q positivos, en quienes la proteinuria fue más frecuente (OR=4.3, IC95% 1.7 – 11, p=0.003). Se encontró correlación inversa débil entre los títulos de anti-C1q, el consumo de C3 (r=–0.54, p<0.001) y la depuración de creatinina (r=–0.33, p=0.035); una correlación directa débil, con la proteinuria (r=0.35, p=0.024) y la actividad de la enfermedad, la cual se determinó con el Índice de Actividad de Enfermedad (SLEDAI) (r=0.48, p<0.0001). Conclusiones: Los anticuerpos anti-C1q pueden ser útiles en la evaluación de la nefritis lúpica activa, y podrían ser implementados como un marcador diagnóstico de nefritis lúpica y como un posible marcador de actividad de la enfermedad en pacientes con LES, tal como lo ha sugerido la Liga Europea contra el Reumatismo (EULAR).
Palabras clave: Anticuerpos anti-C1q anticuerpos anti-DNA nefritis lúpica.
2014-03-28 | 735 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 20 Núm.4. Octubre-Diciembre 2013 Pags. 195-201 Rev. Colomb. Reumatol. 2013; 20(4)