Autor: Tamariz Mascarúa Arturo
De la necesidad de superación y de aprender cada dÃa o cada que pudiera, amigos veterinarios hicimos «activismo» de convencimeinto para lograr reunir más colegas y también procurar que los grandes maestros de nuestros tiempos se unieran al grupo para hacer realidad lo que inquietaba nuestros ánimos y nuestras mentes, era la formación de una asociación de médicos veterinarios, (no existÃa ninguna). Los propósitos o retos eran múltiples, entre ellos vencer aquello que se decÃa que «el peor enemigo del veterninario, era otro veterinario» y los que tenÃan más experiencia por ser mayores o tener más practica en la clÃnica no compartÃan sus conocimientos por «celos profesionales». A los maestros universitarios no les importaba dar conferencias fuera de sus horarios de aulas en la UNAM. El problema económico para sostener el proyecto era otro reto, muchos tenÃamos pocos ingresos, empezábamos a trabajar.
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2003-03-13 | 796 visitas | Evalua este artÃculo 0 valoraciones
Vol. 9 Núm.4. Julio-Agosto 1998 Pags. 128 Revista AMMVEPE 1998; 9(4)