Autores: Sotelo Martínez León, Sánchez Luna C
Objetivos: Señalar la utilidad del ultrasonido transrectal con toma de biopsia y describir la utilidad, indicaciones y hallazgos de los estudios de imagen para la estadificación, seguimiento y reevaluación del cáncer de próstata explicando su comportamiento tumoral y diseminación. Diagnóstico clínico: Se basa en el antígeno prostático específico en sangre y en el tacto rectal pero ambos tienen una precisión subóptima. Un valor de antígeno prostático específico en sangre por encima de 4 ng/mL es anormal, considerando que 70-80% de los casos se debe a condiciones benignas como hiperplasia prostática benigna o prostatitis. En el momento del diagnóstico los predictores más importantes de pronóstico en el cáncer de próstata son la puntuación de Gleason y el estadio clínico; se consideran también los resultados del antígeno prostático, del tacto rectal y de la biopsia transrectal. Diagnóstico de imagen: El ultrasonido transrectal no se recomienda por sí solo como método de imagen inicial para el diagnóstico de cáncer de próstata por su valor predictivo positivo de 15.2%; su papel principal es como guía para la biopsia transrectal, que incrementa la tasa de detección de 36 a 84% dependiendo del tamaño tumoral. La tomografía computada es útil en la detección de nódulos linfáticos regionales o metástasis a distancia, tiene cierta utilidad para detectar extensión extracapsular y carece de indicación para el diagnóstico inicial en la detección de lesiones intraprostáticas o estadificación local. La resonancia magnética es el método de elección para la estadificación local y para la planificación del tratamiento; su papel principal es localizar el tumor y detectar extensión extracapsular con una exactitud entre 60 y 90%. La tomografía por emisión de positrones en combinación con la tomografía simple (PET/TC) están indicadas en la detección y localización de metástasis a distancia en el cáncer de próstata refractario a la terapia hormonal; es poco útil para el diagnóstico primario y la estadificación (sensibilidad 66%, especificidad 81%, valores predictivos positivo 87% y negativo 55%; exactitud 71%). El acetato marcado con 11C se utiliza como radiofármaco en PET/CT y está indicado únicamente en el estudio del paciente con cáncer de próstata tratado con prostatectomía radical, asociado con elevación del antígeno prostático y sospecha de recurrencia tumoral subclínica. Conclusión: El ultrasonido transrectal es el método de imagen de primera elección en el paciente con cáncer de próstata y, por su bajo rendimiento diagnóstico, sólo está indicado como una guía para la biopsia. La resonancia es el método de elección para caracterizar el parénquima prostático y para estadificar localmente el cáncer de próstata. La secuencia ponderada en T1 no tiene mucha utilidad para valorar a detalle la próstata y se usa para detectar hemorragia posbiopsia, evaluar el contorno prostático, trayecto de los paquetes neurovasculares y como secuencia basal precontraste. La secuencia ponderada en T2 es sensible pero no especifica, se recomienda combinarla con al menos dos técnicas de resonancia funcional para una caracterización óptima. El 11C-acetato en el estudio de PET/CT está indicado únicamente en pacientes con cáncer de próstata tratados con prostatectomía radical y asociado con elevación del antígeno prostático específico, siempre y cuando exista sospecha de recurrencia tumoral subclínica.
Palabras clave: Cáncer de próstata antígeno prostático especifico tacto rectal ultrasonido transrectal con toma de biopsia.
2014-10-31 | 1,194 visitas | 3 valoraciones
Vol. 13 Núm.3. Julio-Septiembre 2014 Pags. 230-245 An Radiol Mex 2014; 13(3)