Autores: Carsi Bocanegra Eduardo Emilio, Rafael Alemán Belinda, Michel Quintero Brenda Yazmín
Antecedentes: La colestasis neonatal o incremento de la bilirrubina directa por arriba de 2 mg/dL, o mayor a 20% de la total, es de etiología multifactorial y la nutrición parenteral es la causa tóxica más frecuente. La incidencia general es de 30-40% y hasta 50% en menores de 1 000 g. Objetivo: Conocer la prevalencia de colestasis neonatal secundaria a nutrición parenteral en los prematuros que ingresan a cuidados intensivos neonatales. Material y métodos: Estudio retrolectivo, descriptivo, en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre del ISSSTE en el periodo comprendido de diciembre del 2009 a noviembre del 2012. Se incluyeron prematuros con peso menor a 2 kg al nacer con colestasis neonatal secundaria a nutrición parenteral. Se analizaron edad gestacional, género, peso al nacer, Apgar, uso de nutrición parenteral, tiempo de ayuno, cifras de bilirrubina directa, alanina- y aspartato-aminotransferasas, tiempo de resolución, factores de riesgo asociados y evolución final. Resultados: De 245 neonatos de pretérmino 170 recibieron nutrición parenteral; hubo ocho pacientes con colestasis para una prevalencia de 6.9 casos por cada 100. El promedio de días de ayuno fue 23.5 ± 14.1; la colestasis se observó a los 16.5 ± 3.2 días de vida. La cifra máxima de bilirrubina directa fue de 7.6 ± 3.6. El tiempo de resolución fue de 42 ± 21.2 días. La cifra promedio de aspartato-aminotransferasa fue de 107.5 ± 37.5 y de alanina-aminotransferasa 71.4 ± 25.4. Conclusiones: Al igual que en otros reportes publicados encontramos que el ayuno prolongado, la prematurez extrema, la sepsis y el retraso en alcanzar una adecuada alimentación enteral fueron las principales causas que favorecen el desarrollo de esta afección.
Palabras clave: Colestasis neonatal nutrición parenteral prematurez.
2014-10-31 | 612 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 19 Núm.3. Julio-Septiembre 2014 Pags. 261-266 Rev Esp Med Quir 2014; 19(3)