La salud del niño en las Américas y en Cuba

Autor: Dotres Martínez Carlos

Fragmento

Distinguidas y distinguidos delegados e invitados, Compañeras y compañeros, Colegas todos: Constituye para mí un altísimo y doble honor que el Comité Organizador me ha conferido al invitarme para ofrecer esta Conferencia, no sólo por ser Ministro de Salud, sino por mi condición de pediatra cubano, ante un nutrido y selecto grupo de colegas de Cuba, de América y el mundo que nos honran con su presencia. Nos reúne, abordar el tema de la "Salud Infantil"; si concebimos el término "salud", no sólo como la ausencia de la enfermedad, sino, como el completo bienestar físico, mental y social del individuo; no hay duda alguna, y en eso estaremos de acuerdo, que en este mundo de hoy es mucho aún lo que nos queda por hacer, pues la mayor parte de la humanidad sufre y la salud no es más que una resultante de múltiples factores, donde existe una marcada desigualdad entre sus determinantes que condicionan en la mayoría de nuestros países, una situación desfavorable en este sentido a las puertas del siglo XXI. La sociedad que nos ha tocado vivir y con la cual estamos comprometidos a mejorar y garantizar un futuro mejor, se ve hipotecada por la falta de voluntad política de los gobiernos para resolver los problemas sanitarios más acuciantes, donde la salud de la madre y el niño están inmersas en ese mar de calamidades sin ningún tipo de prioridad para resolverlas. Donde de todos los nacimientos registrados el 12% se produce en el mundo desarrollado, el 18% en países menos adelantados y el 70% en países en desarrollo; donde en el quinquenio 90-95 unos 15 millones de niños nacieron cada año de madres adolescentes o mujeres de más de 35 años; donde más de 11 millones de niños fallecen antes de alcanzar los 5 años de vida; donde más de 8 millones de lactantes mueren durante su primer año de vida, y se presentan tasas que van de 6.9 X 1 000 nv en países desarrollados hasta 106.2 X 1 000 nv en países en desarrollo.

Palabras clave: Salud infantil.

2003-03-25   |   620 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 70 Núm.2. Abril-Mayo 1998 Pags. 122-128. Rev Cubana Pediatr 1998; 70(2)