Autores: Granados Oliveros Lina María, Esparza Bohorquez Maribel
Introducción. Se reconoce que uno de los aportes de la enfermería basada en la evidencia (EBE) es el mejoramiento de la calidad de la atención y existen organizaciones como la Asociación de Enfermeras Registradas de Ontario (RNAO) que han desarrollado guías de práctica clínica y estrategias metodológicas para su implementación. El objetivo de este artículo es describir la experiencia y reflexiones sobre el proceso de implementación de guías de EBE de la RNAO, haciendo énfasis en los resultados de adherencia y sostenibilidad de tres guías en una institución de tercer nivel. Temas de reflexión. La organización RNAO ha elaborado una herramienta de implementación según el modelo de Proceso de Conocimiento para la Acción que implica seis fases: identificación del problema, adaptación al contexto local, evaluación de los facilitadores y barreras para el uso del conocimiento, adaptación, implantación de intervenciones/estrategias de implementación, monitorización, evaluación y sostenibilidad. Todas estas se adelantaron para implementar inicialmente tres guías (Valoración y manejo del dolor”, “Prevención de caídas y lesiones derivadas de las caídas” y “Valoración del riesgo de lesiones de piel por presión”), en una institución de tercer nivel. Conclusiones. La auditoría y verificación periódica de las estrategias implementadas promueve la adherencia del personal de los servicios en el cumplimiento de las metas institucionales y la sostenibilidad del cambio logrado.
Palabras clave: Enfermería enfermería basada en la evidencia práctica clínica basada en la evidencia calidad de la atención en salud manejo del dolor accidentes por caídas cuidados de la piel.
2020-04-09 | 536 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 23 Núm.1. Abril-Julio 2020 Pags. 85-94 MedUNAB 2020; 23(1)