En México, el interés de la nutrición renal ha crecido de forma abrupta durante los últimos 10 años, y no es para menos dada la alta prevalencia de la enfermedad renal crónica que nos aqueja en el país; sin embargo, la nutrición renal no es una especialidad del área de la nutrición que deba considerarse nueva, ya que desde hace más de 50 años se ha ido transformando.
El tratamiento nutricional es clave en la terapéutica de los pacientes que cursan con alguna patología renal; y desde los inicios de la nefrología quienes día a día se enfrentaron con la problemática de no contar con guías o recomendaciones nutricionales o quienes enfrentaban los retos (que bien conocemos) de transformar esas recomendaciones en planes de alimentación, fueron tanto médicos como nutriólogos y dietistas que estaban a cargo de pacientes con diferentes nefropatías y quienes fueron aprendiendo en la misma práctica o de la evidencia, que hace más de cincuenta años era escasa. Esto pudo ser una barrera importante para muchos dietistas o nutriólogos, pero no para la especialista en nutrición (E.N.) Julieta Velázquez Razo, quien convirtió esta falta de información en una fortaleza y fue aprendiendo y compartiendo ese conocimiento durante muchos años en el Instituto Mexicano del Seguro Social. En el año 2008 la E.N. Velázquez Razo, junto con tres profesionales de la nutrición, las especialistas en nutrición Julia Nava Hernández, Silvia Moran Lira y Verónica Figueroa González, tuvieron la visión de juntar a los interesados en el área y crear la Asociación Mexicana de Especialistas de Nutrición Renal (AMENUR), persiguiendo el objetivo de unir el conocimiento y experiencia de los expertos para beneficiar a los pacientes. La AMENUR fue el anhelo de cuatro destacadas especialistas que a través de mucho trabajo, esfuerzo y dedicación se hizo realidad.
2020-11-23 | 903 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 2 Núm.3. Septiembre-Diciembre 2019 Pags. 63 Rev Mex Nutr Ren 2019; 2(3)