Hiperglucemia persistente asociada a retinopatía diabética en pacientes diabéticos tipo 2 en Veracruz

Autores: Torres Hernández Rosa María, Hernández Ojeda Humberto, González Jiménez Beatriz, López Balderas Nayali, Amaya Herrera Larisa Danely, Hernández Orozco Héctor

Completo


Introducción
La diabetes mellitus es un grupo heterogéneo de trastornos que se caracterizan por concentraciones elevadas de glucosa en sangre siendo los factores de riesgo más importantes son el sobrepeso y obesidad, que se asocian con inactividad física y alimentación inadecuada. Su evolución es silenciosa, progresiva e irreversible se requiere de un manejo con perspectiva dinámica, estructurada e integral, enfocado en el paciente; para su prevención, control y rehabilitación. (1, 2) Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Medio Camino 2016 (ENSANUT MC 2016) la mayoría de los pacientes diabéticos encuestados (87.8%) reportó recibir tratamiento médico para controlar su enfermedad; (3) más sin embargo los resultados de esta encuesta mostraron que la vigilancia médica y prevención de complicaciones especificados en la NOM-015-SSA2-2010 para la prevención, tratamiento y control de la diabetes mellitus están aún lejos de alcanzarse. (3, 4) La retinopatia diabética es una complicación microangiopática crónica en los pacientes diabéticos que se caracteriza por un desorden de la vasculatura de la retina que se desarrollan en algún grado en casi todos estos pacientes con larga evolución, se desarrolla generalmente entre los 10 y los 20 años luego del inicio de la diabetes, y progresa más rápido no se diagnostica o no controla cuando dicha enfermedad4 La Asociación Americana de Diabetes en sus guías de cuidado médico en Diabetes 2015 control glucémico en un paciente adulto debe de ser menor de 7% de hemoglobina glucosilada. (2, 3) La retinopatía diabética tiene una prevalencia del 43.6% a nivel internacional; mientras que a nivel nacional se encontró una prevalencia del 31.5% en el estudio más extenso hasta el momento, siendo la causa más frecuente de ceguera entre la población en edad productiva. (5, 6) Los principales factores de riesgo para el desarrollo de una retinopatía diabética son: duración de la enfermedad, mal control metabólico, hipertensión arterial, hiperlipidemia y desconocimiento de la enfermedad. La sintomatología se describe como una pérdida lenta y progresiva, tanto unilateral como bilateral de la visión, o una pérdida brusca en algunos casos. Se consideran como signos críticos las hemorragias retinianas tanto superficiales como profundas, exudados duros siendo estos depósitos extracelulares de lípidos y proteínas séricas, con predilección por la mácula, o exudados blandos siendo estos otros infartos isquémicos focales en la capa de fibras nerviosas, con aspecto algodonoso, de bordes imprecisos, además de anomalías vasculares retinianas como arrosariamiento venoso, asa venosa, envainamiento venoso, anomalías microvasculares intraretinianas como respuesta a la isquemia retiniana focal; aparecen alrededor de la zona de no perfusión o neovascula- rización, proliferación fibrosa, contracción del vítreo o del tejido fibroso. (4,7) La clasificación y graduación de la retinopatía se basan en la gravedad de las lesiones vasculares debido a la facilidad de la visualización de la vasculatura interna de la retina. La clasificación propuesta por el Early Treatment Diabetic Retinopaty Study (ETDRS) respaldado por el National Eye Institute emplea criterios homogéneos de clasificación y tratamiento basándose en las características anatómicas de la retina y en el número de lesiones microvasculares detectables fotográficamente., aunque sin embargo debe tenerse en cuenta que, por ser de base anatómica, la escala de severidad ETDRS no es una medida cuantitativa verdadera y puede no reflejar déficits funcionales importantes. (5, 8, 9) El plan de acción mundial de la OMS para el período 2014-2019 incluye la Retinopatia Diabetica, siendo su objetivo general es reducir la discapacidad visual evitable como problema de salud pública mundial y garantizar el acceso a los servicios de rehabilitación para los discapacitados visuales. El plan se apuntala en cinco principios y enfoques: el acceso universal y la equidad, los derechos humanos, la práctica basada en datos científicos, un enfoque basado en la totalidad del ciclo vital y la potenciación de las personas con discapacidad visual.10, 11,12 El objetivo del estudio fue determinar la relación entre la hiperglucemia persistente y la retinopatía diabética. 

Material y Métodos
Se realizó un estudio de tipo observacional, transversal, prospectivo, analítico durante el periodo febrero-mayo del 2018, en 64 pacientes con Diabetes Mellitus tipo 2 del Municipio de Veracruz, con los siguientes criterios de inclusión pacientes con diabetes mellitus tipo 2, edad 30 a 50 años y acepten ingresar al estudio. Los pacientes se dividieron en dos grupos: grupo 1 pacientes diabéticos con retinopatía diabética y Grupo 2 pacientes sin retinopatía diabética. Se aplico un cuestionario para datos de identificación personal como nombre, sexo, edad, IMC, años de evolución de la enfermedad, frecuencia de la medición de la glucosa y si recibe tratamiento actualmente. Se exploró la agudeza visual y en fondo de ojo se identificó la prsencia de microaneurismas, exudados, hemorragias y neoformaciones, posteriormente se evaluó la retinopatía diabética proliferativa y no proliferativa en ambos ojos. Se tomaron exámenes de laboratorio para medir glucosa en ayuno y Hemoglobina glucosilada con el analiza- dor de química sanguínea H-100. La información obtenida fue capturada en hojas del programa Excel de la paquetería de Microsoft Office 2016, la información se exportó a la paquetería SPSS versión 22 para la estadística inferencial prueba X2, correlación de Pearson y t de Student.

Resultados
Se estudiaron 64 pacientes diabéticos tipo 2, la edad de los pacientes del grupo 1 fue 52.83±9.5 años y grupo 2 58.94±10.85 años( p<0.05). El género en grupo 1 femenino 19 (63%) y masculino 11 (34%) en grupo 2 femenino 25 (73.5%) y masculino 9 (26.5%), en cuanto a los años de evolución de la enfermedad el guipo I 12.3±6.2 y grupo 2 10.64±6.16(NS) (Tabla 1). En el control y monitoreo de la glucosa el grupo 1 202.63±65.75 mg/dl y el grupo 2 143.55±50.76 mg/dl. HbAIc en grupo 1 10.11±2.5% y el grupo 2 de 8.07±2.3% (p 0.001). Así como la medición de la glucosa por días y meses fue superior en grupo sin Retinopatía Diabética (Tabla 2). En la evaluación de Agudeza Visual en el ojo derecho en el grupo de pacientes con RD se encontró que 20 (66.7%) tienen una visión cercana a lo normal y 1 (3.3%) persona visión baja profunda, en el grupo de pacientes sin RD se encontró que 18 (52.9%) pacientes tienen una visión cercana a lo normal y de igual manera 1 (2.9%) paciente con visión baja profunda. (NS) El fondo de ojo en la pregunta si anteriormente se habían realizado un examen de fondo de ojo, para el grupo de pacientes con RD 22 (73.3%) afirmo nunca haberse realizado anteriormente el examen y para el grupo de pacientes sin RD 25 (73.5%) negó haberse realizado anteriormente el examen (p= 0.98) Los pacientes con retinopatía diabética en ojo derecho las hemorragias se presentaron en 9 (30%) neoformaciones 6 (20%) y en el ojo izquierdo predominaron las hemorragias y los exudados 10 (33.3%), neoformaciones 5 (16.7). (Tabla 3) La correlación de los hallazgos de pacientes con retinopatía diabética y la HbAIc en ojo derecho fue de r= .3296 (Figura 1) y en ojo izquierdo r =.4306 (Figura 2). 

Discusión
La retinopatía diabética tiene una prevalencia del 43.6% a nivel internacional; siendo un porcentaje semejante al 46.9% hallado en nuestra población diabética, mientras que a nivel nacional se encontró una prevalencia del 31.5%, siendo la causa más frecuente de ceguera entre la población en edad productiva. (5) En nuestro estudio se encontró que de acuerdo con el diagnóstico oftalmológico en la prevalencia de retinopatía diabética por genero se presentó en 19 (63.3%) mujeres y 11 (36.7%) hombres, hallazgos que coinciden con lo publicado por Cruz BIi, Kaufer HA, Benítez AR, Valdés RA. en relación con que la diabetes mellitus no tiene una prevalencia al género, contrario a la RD que tiene una prevalen- cia hacia el sexo femenino. (15) En ese mismo estudio se demuestra que la RDNP es más frecuente que la RDP donde se presentan en un 80.7% y 19.3% respectivamente, siendo equiparables estos resultados a los nuestros donde 22 (73.3%) pacientes se clasifican con hallazgos de RDNP y 8 (26.7%) pacientes con RDP. (14) Hernández P.A, Tirado M.J, Rivas C.M, Licea P.M reportan en su estudio que el 29.4% de su población presentó RDP, lo cual se asemeja con nuestros resultados que reportan una prevalencia de 26.7. Lo mismo sucede con la RDNP en donde ellos reportan una incidencia de 70.6% y en nuestro caso 73.3%, siendo ambos valores muy cercanos. (15) Aveleira OB reporta que el rango de edad más frecuen- te fue de 61-70 años representando el 26.5% de los casos, seguidos del grupo de 51-60 años de edad. Datos que también coinciden con el autor Delcourt C, estos resultados difieren con los de nuestro estudio, ya que la mayor prevalencia se encuentra en el grupo de edad de 50-59. años (43.3%) y en segundo lugar el grupo de 60-69 años representando el 13.3%. (14, 16) En cuanto al tiempo de evolución, el 53.3% de nues- tros pacientes con RD tenían más de 10 años de evolución, como Vila Ll, Viguera J y Alemán R que reportan un porcentaje ligeramente mayor (58.4%). (17) El control metabólico es pilar fundamental de la terapia para evitar las complicaciones, así lo demuestra el Estudio Prospectivo de Diabetes del Reino Unido (UKPDS) que confirmó que un control adecuado de la glicemia en los diabéticos tipo 2 es un factor benéfico y retrasa el inicio de la retinopatía cuando se establece una terapia intensiva que reduce la HbA1C a una media del 7%. Por cada punto porcentual de reducción en la HbA1C hubo un 35% menos de riesgo en el desarrollo de complicaciones. (18, 19)

Palabras clave: Retinopatía diabética hiperglucemia diabetes mellitus tipo 2.

2021-09-18   |   351 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 14 Núm.1. Enero-Junio 2019 Pags. 36-40 Rev Invest Cien Sal 2019; 14(1)