Prevalencia e incidencia de bruxismo en niños de 3 a 12 años de edad asociado a la pandemia por COVID-19

Prevalence and Incidence of Bruxism in Children 3 to 12 Years of Age Associated with the COVID-19 Pandemic 

Autores: Tiburcio Morteo Leticia , Rodríguez López Diana María , Capetillo Hernández Guadalupe Rosalía , Méndez Quevedo Teresita de Jesús, Roa Gonzalez Sheilla del Carmen, Cruz Reyes Brenda del Carmen

Completo

Introducción

El bruxismo (BX) es un problema de salud que forma parte de la vida moderna, siendo complejo al momento de conceptualizarlo sea como hábito, síndrome, enfermedad, parafunción o parasomnia(1,2,3). De lo anterior, se pueden destacar tres hechos sobresalientes respecto al BX: el primero, se considera un fenómeno muscular (neuromuscular); el segundo, es clasificado de tipo diurno o nocturno, y el tercero es hubicado como un problema del sueño (parasomnia)(2,4,10).

En la literatura encontramos que es de origen multifac- torial, es decir hay diversos factores causales, destacando factores psicosociales y psicológicos asociados a trastornos conductuales, familiares, de personalidad, tensiones emo- cionales, estados de depresión, ansiedad y miedo, dando lugar a que situaciones con alto nivel de estrés, ansiedad o cambios en la cotidianidad emocional como lo es la pande- mia por COVID-19 influyan en la ocurrencia de BX.

El BX presenta alta prevalencia e incidencia a nivel glo- bal, y se define como; actividad motora oral diurna o nocturna que consiste en el apriete o rechinamiento involuntario, rítmico o espasmódico no funcional de los dientes(3,5). El bruxismo despierto (BD) o bruxismo del sueño (BS) en los niños es un importante problema de salud público, siendo este principalmente uno de los motivos de consulta en Odontopediatria, y de preocupación para los padres debi- do al rechinamiento dentario por largos períodos, ocasio- nando desgaste en los dientes, cefaleas, dolor en músculos de la masticación, y limitación en la apertura bucal (trismus) (3,7,10), trayendo consigo un impacto negativo en la calidad de vida de los niños y adolescentes que lo presentan, es por ello que debe ser conocido por el odontólogo para dar un diagnóstico oportuno, identificar los factores de riesgo, educar a los padres y prevenir sus posibles consecuencias en la salud bucal dependiendo del grado de clasificación que presente cada paciente. (Figura 1)

En diferentes investigaciones se considera que en niños de 3 hasta 5 años hay un desgaste de órganos dentales fisio- lógico, ya que corresponde al período de abrasión y desgate preparatorio al recambio de los dientes deciduos debido a que en esta etapa el niño se encuentra en un período de  gran plasticidad tisular de los tejidos óseo, dentario y neuroarticular, este estado fisiológico no menciona síntomas de dolor, ni espasmos9. Para diferenciar lo fisiológico de lo parafuncional se necesita un buen diagnóstico, para ello se recomienda la integración de dos aspectos: cuestionario a los padres y examen clínico extra e intraoral del niño(3,8,6).

Materiales y métodos

Se realizó un estudios descriptivo y transversal durante el periodo febrero-mayo del año 2021. La población muestra fueron 124 padres de familia de niños de 3 a 12 años del estado de Veracruz, quedando una muestra de 74 niños con un indicativo de diagnóstico definitivo de BX del total de par- ticipantes. La recopilación de los diagnósticos fue mediante un intrumento de cuestionario autoinformado (CBA), este instrumento se realizó en Google Forms y se aplicó en modalidad virtual. El CBA de forma individual contiene 11 preguntas, es de una escala tipo Likert con cinco posibles respuestas, cada una con un valor (1: Nada hasta 5: mucho). Para agrupar los puntajes de los niños con y sin BX se ocupó la escala del estudio CBA incial, las puntuaciones para el diagnóstico fueron de 0 a 18 improbable que el paciente tenga sintomas de BX, puntuaciones de 19 a 24 indican un puntaje prome- dio de diagnóstico de BX y una puntuación mayor de 25 seria indicativo de un diagnóstico definitivo de BX.

Resultados

La muestra estuvo constituida por 124 padres de familia. Conformados por 64 mujeres (51.6%) y 60 hombres (48.4%). La prevalencia de BX en niños antes de la pandemia fue de (24.19%), con una incidencia del (35.48%) duran- te la pandemia, los cuales presentaron síntomas definitivos de BX, siendo un total de 74 niños (59.68%) del total de la población; mientras que el (40.32%) obtuvieron valores de improbable BX. En cuanto a la prevalencia por rango de edad se encontró que los niños del rango de 11-12 años de edad tuvieron el mayor porcentaje de prevalencia de BX con un (43%), seguido por el rango de 7-8 años de edad con un (30%), después por el rango de 9- 10 años con un (7%), y por último los rangos de 3-4 y 5-6 años de edad con (10%). Res- pecto a la prevalencia de BX en niños por género, se encontró que esta fue mayor en el género femenino con (56.67%), mientras que en el género masculino fue de (43.33%).

La incidencia por rango de edad, se encontró que del total de 44 casos nuevos de BX durante la pandemia, el rango de 11-12 años de edad fue el de mayor incidencia con (39%), seguido por el rango de 7-8 años de edad con (20%), posteriormente el rango de 9-10 años de edad con (16%) y por últimos los rangos de 5-6 y 3-4 años de edad con (16%) y (9%) respectivamente. En cuanto a la inciden- cia de BX por género, el diagnóstico definitivo de BX fue igual para ambas partes con (50%) y (50%). 

Discusión

Comparando los resultados obtenidos en este estudio de prevalencia de BX en niños de 3-12 años de edad, donde el porcentaje general de prevalencia de BX fue de (24.19%), mientras que los resultados obtenidos por Mauritis K. A et al (2019) fueron de una prevalencia general de (24.20%) en niños de 7-12 años de edad, habiendo una similitud en los resultados entre ambos estudios. Por otro lado, la mayor prevalencia de BX antes de la pandemia por rango de edad fue de (43%) en niños de 11-12 años, a diferencia de los resultados obtenidos por Leyla Carolina Moreno Ramírez y Francisca Andrea Soto Robla (2018) donde la mayor prevalencia por rango de edad fue en niños de 6 años.

Conclusión

El BX se puede presentar a cualquier edad, por eso es importante diagnosticarlo tempranamente para prevenir los daños causados en los órganos dentales, tejidos y músculos que los rodean, tales como; desgaste dental (ver figura 2), dolor de cabeza, cefaleas, dolor en los músculos masticatorios, limitaciones en la apertura bucal, dolor en la articulación temporomandíbular, fracturas dentales, pulpitis y rechinamiento o apretamiento dental. Esta patología existe en los niños de manera fisiológica hasta la edad de 3 a 5 años aproximada- mente, una vez pasada esta edad es indispensable que los profesionales de la odontología pediátrica y en general cuen- ten con los conocimientos necesarios para diferenciar entre la etapa fisiológica del BX y la parafuncional para que de esta forma se busque un plan de tratamiento funcional para cada paciente. Otro factor importante que se debe resaltar es que el BX no solo es una patología asociada a los dientes sino que también influyen situaciones de diferente índole como lo es el factor emocional, como se analizó en esta investigación asociándolo a la contingencia ocasionada por el virus SARV-CoV-2 con lo cual se logró confirmar que durante la pandemia aumentó el diagnóstico definitivo de BX, con una incidencia de (35.48%), lo que confirma que la pandemia por covid-19 ha contribuido en la aparición de nuevos casos de BX en niños y parafunciones dentales.

Palabras clave: Bruxismo infantil trastornos temporomandibulares estrés ansiedad bruxismo du- rante covid-19

2023-09-17   |   153 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 16 Núm.1. Septiembre 2021 Pags. 50-53 Rev Invest Cien Sal 2021; 16(Supl. 1)