Autores: Wester-Pérez Ximena, Wester-Pérez Eduardo
Durante el año 2019, en el mes de diciembre, se identificó en Wuhan, China, un nuevo coronavirus, el cual se propagó muy rápidamente, generando la actual pandemia de SARS-CoV-2, comúnmente co-nocida como COVID-19 (1), la cual ha impactado con gran repercusión en la población, por su letalidad y su rápida transmisión, y también en la economía mundial.La acelerada expansión de esta pandemia ocasionó zozobra en la población por todas las conse-cuencias que acarrea. Este temor, sumado a la ignorancia y ausencia de preparación acerca de cómo afrontar una emergencia sanitaria por parte de la población y del personal de salud, los llevó a tomar medidas drásticas como la automedicación. Esta última es consecuencia directa de la gran difusión de supuestas “medidas curativas” en redes sociales, a las cuales la mayoría de ciudadanos tienen acceso y, sin comprobar si son verdaderas o siquiera eficaces, las aplican para cuidar su salud. Estas al ser usadas a largo plazo y sin un estricto control originaron graves daños en el organismo e inclusive lle-garon a producir la muerte (2). En el Perú, debido a la inesperada llegada de la COVID-19 y su rápida propagación, se pudieron obser-var las deficiencias que existían para hacer frente a un estado de emergencia, generando desconcierto en la población. Además, la inexperiencia en combatirla llevó a experimentar con numerosos fármacos al inicio de la pandemia, algunos de los cuales se materializaron gravemente en la población, ocasio-nando reacciones desfavorables en el organismo y un fatal desenlace (3).
Palabras clave: Farmacovigilancia COVID-19 radiografía
2023-09-29 | 86 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 7 Núm.1. Enero-Marzo 2021 Pags. 147-148 REM HRL 2021; 7(1)