Autores: Nava Castañeda Ángel, Corredor Osorio Rafael, Tovilla y Pomar José Luis, Tovilla Canales José Luis, Muñoz Salas Susana
La phthiriasis palpebral es una causa poco común de blefaritis y conjuntivitis que puede fácilmente ser omitida por el oftalmólogo. Un alto índice de sospecha y un cuidadoso examen en la lámpara de hendidura sobre las pestañas y márgenes palpebrales del paciente lleva a un diagnóstico certero. Aunque los piojos pueden ser difíciles de detectar, la acumulación de liendres (larvas del piojo) y de las heces de los piojos sobre las pestañas, que se aprecian como un material granular rojizo marrón en la base de las pestañas, ayuda a realizar el diagnóstico. La pediculosis se transmite por contacto íntimo con individuo infestado por vestidos y ropas de cama contaminadas, la otra forma de transmisión es típicamente por contacto sexual. En los niños la infestación puede ser debida al contacto íntimo con la madre o niñera. Pestañas y cejas son los sitios de predilección. En los adultos la phthiriasis palpebral es probablemente transmitida del área genital a los ojos mediante la mano. El tratamiento medicamentoso debe acompañarse de una cuidadosa remoción de los piojos y liendres de las pestañas del paciente. La aplicación local de pediculicidas tales como: fluoresceína al 20%, ungüento de óxido de mercurio amarillo al 1%, petrolato de fisostigmina, lociones de hexacloruro de gamma benceno, malatión, carbaryl y permetrina, o el uso de crioterapia y láser de argón. Miembros familiares, contactos sexuales, compañeros íntimos deben ser examinados y tratados, vestidos, ropas artículos personales deberán ser desinfectados a una temperatura de 50 grados centígrados por 30 minutos.
Palabras clave: Phthirus pubis piojo liendre pediculosis palpebral.
2003-04-15 | 2,268 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 43 Núm.5. Septiembre-Octubre 2000 Pags. 180-184. Rev Fac Med UNAM 2000; 43(5)