Autor: Quijano Narezo Manuel
La humanidad evolucionó de acuerdo a la selección natural darwiniana y las especies vivas fueron creadas por el azar genético y factores ambientales. La misma iglesia católica acepta ahora esto, aunque se guarda un punto de explicación tradicional en la aparición de la especie humana, para considerar que hubo ahí un soplo divino; pero no en el origen de las especies. Entre las millares que existen hay muchas que por sus características se les llama sociales (hormigas, avispas, abejas...), aunque también se observan conductas que merecen ese calificativo, en aves y mamíferos, y han sido motivo de estudio con la intención de descubrir si algunos rasgos de la conducta humana pueden tener antecedentes filogenéticos en animales inferiores. En los años cuarenta surgió una nueva rama de la biología llamada etología, la cual estudiaba la conducta de especies animales en su hábitat natural y en plena libertad. A base de cámaras de cine que hacían exposiciones cada cierto tiempo, de marcas detectables a distancia en algunos individuos del grupo y otros trucos, se conocieron las costumbres de alimentación, actividades en distintas horas del día, formas de copular y de dormir y, por supuesto, conductas grupales, de mando, de sometimiento, de selección, etc., de muchas especies, principalmente de primates. Los iniciadores de esta rama, Lorentz y Timbergen fueron acreedores del premio Nobel por su contribución; Lorentz, inclusive, fue el primero en considerar que el discernimiento, la inteligencia, la razón y el pensamiento pueden ser productos de la evolución de y en un cerebro estructurado. La etología estudia los patrones de conducta de una especie, la adaptación de esos patrones a problemas específicos del entorno, las etapas por las que un patrón da origen a otro, o su transformación en un patrón de otra especie. El aprendizaje de ciertas conductas, lo que antes era dominio de la psicología lo es ahora de la etología y lo enfoca como función del sistema nervioso bajo la influencia de ciertos péptidos y hormonas; por otra parte extiende su campo de estudio a todas las especies vivas y por supuesto incluye, en ese campo, al animal humano. Pero esta rama de la biología ubica todavía su énfasis en el organismo individual y la fisiología.
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2003-08-18 | 10,184 visitas | 4 valoraciones
Vol. 41 Núm.1. Enero-Febrero 1998 Pags. 5-6. Rev Fac Med UNAM 1998; 41(1)