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La EA es un trastorno neurodegenerativo que produce declinación intelectual progresiva, como así también una variedad de alteraciones neuropsiquiátricas y conductuales. Las alteraciones neuropsicológicas de la EA incluyen anomalías de la memoria reciente y remota, afasia, trastornos visuoespaciales y visuoconstrucivos y defectos del cálculo, praxias, abstracción y juicio. El compromiso neuropsiquiátrico incluye alteraciones de la personalidad, ideas delirantes y confusión, alucinaciones, depresión, trastornos del sueño, apetito y de la sexualidad, y presencia de conductas motoras anormales. (Cummings y Benson, 1992). Típicamente, los síntomas más severos y tempranos en la EA son las dificultades insidiosas y progresivas para recordar los aprendizajes o situaciones más recientes, hecho que es seguido de alteraciones en el lenguaje, capacidades visuoespaciales, praxias y compromiso de la atención. En los estadíos más precoces de la enfermedad, la personalidad y los aspectos relacionales y sociales están generalmente preservados, pero en etapas intermedias y tardías, suelen aparecer una serie de síntomas de la esfera conductual que afectan significativamente la calidad de vida de pacientes y convivientes.

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2003-09-05   |   2,644 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 24 Núm.4. Diciembre 1999 Pags. 26-34 Rev Neurol Arg 1999; 24(Supl 1)