Uno de los problemas a los que con frecuencia se enfrenta el cirujano, es el diagnóstico y tratamiento de los derrames pleurales, característica clínica común a muchas enfermedades locales sistémicas. El paso inicial es determinar la causa, investigando si se trata de una trasudado un exudado, lo que se logra mediante la evaluación del líquido obtenido por toracentesis. De acuerdo con los criterios de Light, los exudados cumplen al menos una de las siguientes condiciones: 1) relación de proteínas entre el líquido pleural y el suero, mayor de 0.5%; 2) relación de LDH entre el líquido pleural y el suero, mayor de 0.6%; 3) LDH entre el líquido pleural mayor de 200 UI. Cuando se determina que el líquido es un exudado se deben realizar estudios adicionales. Las infecciones pulmonares y las neoplasias son las causas más frecuentes de exudados, y el conocimiento de sus comportamientos particulares ayuda a explicar la variedad de manifestaciones clínicas y las indicaciones para el tratamiento. Cada vez más los procedimientos quirúrgicos, como la toracostomía, tienen un uso limitado a situaciones muy específicas y con advenimiento de drogas y nuevos equipos, incluida la taracoscopia, el tratamiento se ha convertido en menos agresivo.
Palabras clave: Derrame pleural exudado trasudado derrame paraneumónico derrame neoplásico toracentesis terapéutica toracostomía pleurodesis.
2003-12-19 | 3,031 visitas | 1 valoraciones
Vol. 14 Núm.4. Octubre-Diciembre 1999 Pags. 263-275 Rev Colomb Cir 1999; 14(4)