Biopsia del ganglio centinela en cáncer de mama:

Experiencia inicial en el centro clínico de estereotaxia CECLINES 

Autores: Acosta Marín Víctor, Contreras Silva Alberto, Ravelo Pages Ricardo, Hurtado Oscar A, Marín M Carmen Elena, Manzo P Aisa, Pérez Jorge, Longobardi Itala

Resumen

Objetivo: Evaluar la técnica de identificación del ganglio centinela en pacientes con cáncer de mama diagnosticados en el Centro Clínico de Estereotaxia Ceclines. Materiales y métodos: Entre febrero de 1998 y agosto de 2001, se evaluaron 57 pacientes con cáncer de mama infiltrantes, iguales o menores a 2 cm, o carcinomas ductales in situ mayores de 4 cm, diagnosticados mediante biopsia percutánea por guía estereotáxica o ecográfica. Se utilizó la combinación de tecnecio99 con colorante, mediante inyección peritumoral. Resultados: Se encontró el ganglio centinela en 54 de los 57 casos en los que se realizó la técnica (94,73%). No hubo falsos negativos cuando se relacionó el diagnóstico definitivo del ganglio centinela con el resultado de la disección axilar. De 48 casos con ganglio centinela negativo, en 5 (10,41%) en el diagnóstico definitivo se encontró enfermedad. Se reportó enfermedad maligna en 6 casos (11,11%). De estos, en 4 (66,66%) el centinela fue el único ganglio con enfermedad al realizar la disección axilar. El diagnóstico de centinela positivo para enfermedad maligna estuvo relacionado con el tamaño del tumor, diferenciación y grado tumoral. El promedio de ganglios centinelas encontrados fue de 1,35 ganglios. Conclusiones: La técnica de identificación del ganglio centinela es útil y sencilla para el diagnóstico de enfermedad ganglionar axilar. La combinación de ambos métodos (colorante y trazador) se traduce en un mayor porcentaje de éxito. El procedimiento puede ser realizado en forma ambulatoria.

Palabras clave: Ganglio centinela cáncer mama mapeo linfático contador gamma disección axilar.

2004-02-02   |   1,513 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 14 Núm.3. Junio-Septiembre 2002 Pags. 151-158. Rev Venez Oncol 2002; 14(3)