Fragmento

Allá por el año 1831, Chuquisaca fue conmovida por un acontecimiento inaudito al conocerse que el Vice Rector del Seminario Pontificio de San Cristóbal Dr. Faustino Pérez Rendón, fue víctima de un intento de envenenamiento. El pueblo en su totalidad, católico, apostólico y romano, no podía concebir por más esfuerzos que hacia, que en Chuquisaca disfrutasen de apacible vida individuos entregados en cuerpo y alma a satanás, ya que la heregía cometida con el Vicerrector del Seminario. Sólo podía ser obra del propio demonio encarnado en unos perillanes. El revuelo fue mayúsculo y la agitación permanente, sobre todo en las beatas que en el suceso encontraron un sabrosa manjar para sus comidillas.

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2004-02-23   |   883 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 62 Núm.111. Julio-Diciembre 1997 Pags. 130-134 Rev Inst Med Su 1997; LXII(111)