Fragmento

El bilbaíno Miguel de Unamuno, filósofo y escritor calificado por la crítica literaria como uno de los precursores del existencialismo, que constituyó un vasto esfuerzo por dotar de sentido a la excelencia humana sin renunciar a ninguno de sus aspectos, escribió en 1930 en la obra San Manuel, bueno y mártir la siguiente frase: ”Fervor del apasionado de la búsqueda de la verdad, consciente como fue de que la estética sin trasfondo ético, es como un caldo sin carne y comida sin vino”. Así considero la Medicina moderna en el sentido de disciplina, control y vigilancia para una buena práctica de la medicina a la que aspiramos actualmente. Los Consejos Médicos de especialidad juegan ese papel de trasfondo ético, al darle sensatez a la práctica de la Medicina, el crear un ambiente al médico de compromiso para darle eficiencia en su diagnóstico y procedimientos terapéuticos. A las escuelas médicas a mantener un programa de adiestramiento en las líneas modernas de la educación sin olvidar el papel social y el humanismo intrínseco del Médico. En la fase del posgrado lograr adiestrar al médico para ser capaz, en lo individual, de resolver los problemas cotidianos de la población que controlará.

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2004-03-02   |   1,540 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 32 Núm.1. Enero-Marzo 2004 Pags. 4 Rev Mex Angiol 2004; 32(1)