Autor: Angel M Gilberto
Sin lugar a dudas los organismos etiológicos bacterianos, virales y protozoarios ocupan un capítulo muy extenso en los enfermos que a diario acuden a consulta y muchas veces no se da importancia a los agentes que son capaces de producir sintomatología ruidosa, simular enfermedades semejantes, pero distintas a la causa que las origina. Así se pierde tiempo valioso por no pensar en la enfermedad infecciosa. Hay, por ejemplo, la persona que presenta dolor en el hipocondrio derecho, fiebre, escalofríos esporádicos, se le hace el diagnóstico presuntivo de pneumonía o infección pulmonar, se trata con abundantes antibióticos y el cuadro sigue igual sin mejoría, pero con signos más acentuados de enfermedad aguda. La causa radica en un absceso hepático, producido por el protozoario Entamoeba histolytica que, de pensar en ella, en 2 ó 3 días se tiene la desaparición de los síntomas. O el individuo que desarrolla una diarrea aguda que resiste a todo tratamiento y que tiene una infección por Cryptosporidium, frecuente en los inmunodeprimidos por SIDA o la meningitis con cuadro neurológico dramático en esta misma enfermedad, producida por Cryptococcus neoformans.
2004-04-05 | 15,881 visitas | 2 valoraciones
Vol. 27 Núm.2. Abril-Junio 1996 Pags. 52 Colomb Med 1996; 27(2)