Fragmento

La evolución histórica de las sociedades actuales se debe en gran parte a las guerras, al desarrollo tecnológico y a la integración de los diferentes grupos étnicos en las sociedades. Sin embargo, a lo largo de la historia, “las grandes epidemias”, ocasionadas por agentes infecciosos han tenido un gran impacto en la humanidad. Desde el punto de vista de la biología poblacional, la tasa reproductiva de una epidemia 1 indica que la introducción y posterior diseminación de un agente infeccioso depende de tres factores: a) riesgo de transmisión por exposición (tasa de ataque), b) la frecuencia de la exposición por unidad de tiempo, y c) susceptibilidad de la población al agente. La conquista de los Imperios Inca y Azteca por los españoles, ejemplifica el efecto de la introducción de un agente infeccioso en una población susceptible. Las epidemias de peste, ocasionadas por Yersinia pestis –la primera apareció en el año 541 A.C. en Egipto y acabó casi con el 60% de las poblaciones del norte de Africa, Europa y Asia. La segunda, ocurrida durante el siglo XIV (1346), causó la muerte de 30 millones de personas en Europa- demuestran el riesgo y los efectos de la transmisión por exposición en el ser humano.

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2004-05-04   |   1,592 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 25 Núm.2. Marzo-Abril 2004 Pags. 125-133 Acta Pediatr Méx 2004; 25(2)