Resumen

El remplazo de la vejiga después de la cistectomía total o supratrigonal es una técnica actualmente aceptada, pero requiere el sacrificio parcial del colon (ascendente o sigmoideo) o de un segmento de íleon y tiene consecuencias funcionales importantes. Tal sacrificio no se justifica para corregir problemas funcionales, pues basta ampliar la vejiga o flexibilizarla. La ampliación está indicada cuando la vejiga es anatómicamente o funcionalmente pequeña. La adaptabilidad permite que la vejiga contenga un gran volumen de orina a baja presión, lo que es esencial para protección de la porción superior del sistema urinario. La falta de adaptabilidad o distensibilidad dificulta la inhibición de las contracciones vesicales, que son fisiológicas en neonatos y pueden persistir durante la infancia o hasta la vida adulta. La ampliación vesical se realiza con material de tubo digestivo o de urotelio vesical o ureteral. Bramble ideó la ampliación de la vejiga mediante un segmento o parche intestinal en la cúpula de este órgano, para tratar ciertas inestabilidades rebeldes al tratamiento. En este artículo se revisan las técnicas de ampliación vesical y las complicaciones de tal intervención, incluso las ligadas a mucosa digestiva (como trastornos digestivos, moco y litiasis, problemas metabólicos, síndrome de hematuria con dolor y riesgo de trastornos teratógenos), además de indicar los resultados funcionales de las intervenciones, tanto en vías urinarias superiores como en la urodinámica.

Palabras clave: Ampliación vesical vejiga anatómicamente pequeña vejiga funcionalmente pequeña adaptabilidad vesical.

2004-05-31   |   6,775 visitas   |   1 valoraciones

Vol. 15 Núm.2. Mayo-Agosto 1998 Pags. 19-27 Bol Coleg Mex Urol 1998; 15(2)