Autores: González Macías Laura, Unikel Santoncini Claudia, Cruz Carlos, Caballero Alejandro
En este artículo se reúne la información que existe sobre los factores de personalidad implicados en la patogénesis de los trastornos de la conducta alimentaría (TCA); estos últimos se han relacionado con rasgos obsesivos, histéricos e impulsivos. El DSM-IV subdivide los TCA en anorexia nervosa y bulimia nervosa. La primera se asocia con conductas obsesivas y con un exceso de control; la segunda se asocia con conductas más histéricas vinculadas con la impulsividad. Se han encontrado conductas similares entre este tipo de trastornos y la depresión, el trastorno límite de personalidad y los rasgos obsesivo-compulsivos. Sin embargo, se sabe que es muy difícil detectar un trastorno puro, ya que se confunden sus respectivos cuadros clínicos. Los rasgos de personalidad ocupan un lugar muy importante en el origen de los TCA. No obstante, los estudios encaminados a valorar la relación entre estas dos variables han arrojado resultados muy diferentes. A pesar de ello, se han obtenido datos convincentes al relacionar los TCA con determinados rasgos del temperamento y carácter, que aparentemente pueden ser determinantes en la presentación, el origen, el curso y la evolución de los mismos. A partir de los estudios de la personalidad realizados, se pretende detectar determinados factores que intervienen en el desarrollo de los TCA, y que hacen que ciertas mujeres sean propensas a desarrollarlos, o bien pueden ser factores concomitantes. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que la presión del medio para que una mujer se mantenga delgada puede ser un factor importante. La evidencia general es que se trata de un trastorno multifactorial. Las dificultades para establecer una relación entre los TCA y los trastornos de personalidad radica en que estos últimos pueden comportarse como un factor predisponente, una influencia en el pronóstico y la evaluación, una complicación influida por el daño físico o una entidad completamente independiente, que de cualquier manera afectaría la relación del individuo con su medio. Entre los potenciales factores predisponentes se encuentran las características de la personalidad, los trastornos perceptivo-conceptuales, la tendencia a engordar, los patrones familiares patológicos de interacción, las características de la personalidad de los padres y las actitudes y preocupaciones de éstos hacia el peso, la forma del cuerpo y el control. Investigaciones actuales consideran a los rasgos de personalidad, de acuerdo con su intensidad y forma de expresión, como factores importantes, que influyen en la conducta alimentaria, y determinantes para el origen, la evolución, el pronóstico y el tratamiento. El objetivo de este trabajo es describir las características de la personalidad que pudieran condicionar la conducta alimentaria y su comorbilidad con otros padecimientos psiquiátricos.
Palabras clave: Anorexia nervosa bulimia nervosa personalidad carácter temperamento.
2004-06-15 | 2,309 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 26 Núm.3. Mayo-Junio 2003 Pags. 1-8. Salud Ment 2003; 26(3)