Autores: Valencia C Marcelo, Rascón Gasca María Luisa, Quiroga Horacio
Este trabajo tiene como objetivo presentar las principales aportaciones terapéuticas y de investigación realizadas desde 1979 al 2003, en el Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente, antes Instituto Mexicano de Psiquiatría, en donde se aplicaron diversas formas de tratamiento psicosocial a pacientes con esquizofrenia, así como el tratamiento familiar correspondiente, dirigido a las familias de estos pacientes. La esquizofrenia es una enfermedad que se caracteriza por la presencia de sintomatología psicótica, y también porque incapacita al paciente de manera considerable, alterando su funcionamiento psicosocial y familiar. Se ha considerado que el tratamiento integral actual de la esquizofrenia, debe considerar por lo menos cuatro aspectos fundamentales: 1.-el tratamiento farmacológico, 2.-el tratamiento psicosocial, 3.-la terapia familiar, y 4.-el manejo del paciente en la comunidad. Respecto al componente psicosocial, se han identificado áreas específicas en las cuales los pacientes tienen dificultades para tener un desempeño de roles efectivo y satisfactorio en cuanto a su funcionamiento psicosocial. Estas áreas incapacitan a los pacientes a desarrollar actividades que tienen que ver con aspectos ocupacionales, manejo de dinero, relaciones sociales, vínculos de pareja y relaciones familiares. Los tratamientos psicosociales desarrollados a nivel internacional han demostrado su efectividad terapéutica ya que mejoran el funcionamiento psicosocial, ayudan a reducir las recaídas y rehospitalizaciones y a tener un funcionamiento comunitario más satisfactorio para el paciente. En este trabajo se presenta la implementación de diversas modalidades de tratamiento psicosocial llevadas a cabo en varios grupos de pacientes esquizofrénicos: el trabajo con pacientes agudos hospitalizados tuvo cuatro semanas de duración, en pacientes crónicos hospitalizados, el tratamiento fue de dos años, en pacientes crónicos manejados en la Consulta Externa, el tratamiento se aplicó en tres ocasiones, cada una con un año de intervención, y en el último grupo se compararon tres modalidades de intervención: el tratamiento integral, la musicoterapia y el tratamiento psicosocial, durante seis meses de intervención respectivamente. En todos los casos se utilizaron referentemente técnicas terapéuticas grupales y también individuales cuando lo requería el paciente, trabajando en las sesiones la problemática psicosocial de los pacientes, teniendo siempre como denominador común el tratamiento farmacológico en todos los grupos de pacientes. En términos metodológicos, en la mayoría de las modalidades se utilizaron grupos experimentales y controles, evaluando a los pacientes antes y después de las intervenciones por medio de instrumentos de investigación. Se encontró que los tratamientos psicosociales son efectivos cuando se combinan con el tratamiento farmacológico ya que los pacientes presentaron mejorías clínicas considerables, así como en su funcionamiento psicosocial, en el funcionamiento global (síntomas y actividad psicológica, social y laboral),un menor porcentaje de recaídas y rehospitalizaciones, un mayor cumplimiento con los medicamentos antipsicóticos y un mayor nivel de adherencia terapéutica, en comparación con los pacientes controles que recibieron únicamente el tratamiento farmacológico y se mantuvieron estables a lo largo del tratamiento, sin obtener los logros a nivel psicosocial, demostrados por los pacientes experimentales. Los resultados obtenidos coinciden con lo encontrado a nivel internacional, en el sentido que los tratamientos psicosociales aplicados en México también han demostrado su efectividad. El tratamiento que recibieron los familiares estuvo conformado por dos elementos:1 º el psicoeducativo y 2 º el terapéutico. Se inició con un taller psicoeducativo multifamiliar que se dividió en dos partes, la primera consistió en la presentación de temas específicos relacionados con la enfermedad, expuestos por especialistas del equipo con un total de 12 sesiones educativas. Posteriormente, en una segunda parte, en grupos más reducidos se retomaban los temas de las sesiones y se favoreció el manejo de las emociones que la información despertaba en cada familiar y la solución de problemas. Al mismo tiempo se llevó a cabo la terapia unifamiliar, en donde se trabajó la problemática específica de cada familia y su paciente, aproximadamente 5 sesiones, fundamentalmente en cuanto a los límites, la jerarquía y la centralidad, así como el establecimiento de redes de apoyo ara favorecer una mejor evolución de la enfermedad centrada en aspectos comunicacionales, interaccionales y estructurales. Los resultados del estudio de los efectos de la intervención en los familiares, se evaluaron mediante diferentes indicadores, respecto a la carga familiar se observaron respuestas en las cargas: Emocional, económica, física y social, destacando mejoría principalmente en la “carga subjetiva emocional” de los familiares después de recibir el tratamiento. En cuanto a la expresión emocional el nivel alto se presentó con más frecuencia, resaltó el componente de sobreinvolucramiento, compuesto por aspectos de sobre protección y autosacrificio, al término del tratamiento se encontraron diferencias en el componente de sobreinvolucramiento y en la EE global. Se encontró asociación entre la expresión emocional alta, un pobre funcionamiento y la conducta sintomática del paciente. Los familiares que expresaron EE alta, reportaron mayor autodescuido, irritabilidad, violencia y aislamiento por parte de su pariente enfermo. Con respecto a la psicopatología secundaria encontrada en el familiar, se observó que más de tres cuartas relacionan el padecer algún trastorno físico o emocional con la aparición de la esquizofrenia en su pariente, es importante mencionar que de dos familiares uno presentó algún trastorno psiquiátrico, cifra muy superior a la reportada para la oblación general. En cuanto al tipo de diagnóstico se encontró similitud con lo descrito en otras oblaciones, en donde los trastornos depresivos destacan en primer lugar, seguidos por la dependencia al alcohol. Los mejores predictores de la psicopatología en los familiares por medio del uso de la regresión logística fueron: la conducta sintomática del paciente (síntomas positivos y negativos),el número de recaídas con hospitalización y el número de años de evolución de la enfermedad del paciente. R2:. 423; F:7. 102; p > .001.
Palabras clave: Esquizofrenia tratamiento psicosocial funcionamiento psicosocial tratamiento familiar estudio familiar.
2004-06-21 | 1,430 visitas | 1 valoraciones
Vol. 26 Núm.5. Septiembre-Octubre 2003 Pags. 1-18. Salud Ment 2003; 26(5)