EMLA más midazolam en procedimientos diagnósticos y terapéuticos en pediatría

Autores: Vallejo Martínez Mariana, Cervantes P Moisés

Fragmento

Introducción El dolor que sienten los niños durante la realización de ciertos procedimientos invasivos causan importantes respuestas de ansiedad y miedo, haciendo que adopten conductas reactivas de forma anticipada a cualquier tratamiento de este tipo. Los anestésicos locales son drogas que bloquean la conducción nerviosa cuando se aplican localmente al tejido nervioso y sobre cualquier tipo de fibra nerviosa. La gran ventaja de los anestésicos locales es que su acción es reversible; su uso está seguido de recuperación total de la función nerviosa sin evidencias de daños estructurales de las fibras o células nerviosas. En los años 80, sale al mercado europeo un anestésico en crema llamado EMLA (Eutetic Mixture of Local Anesthetics), una mezcla de lidocaina 25mg/dl y prilocaina 25mg/dl, dentro de un vehículo (Carbopol 934) la cual ha demostrado ser útil para proporcionar anestesia cutánea en piel intacta como lesionada con un perfil clínico seguro y una incidencia mínima de efectos secundarios y constituye a nuestro entender un instrumento útil, ya que permite evitar el dolor asociado a diversos procedimientos que precisan analgesia/anestesia cutánea. Son múltiples las aplicaciones que se le han dado dentro de la cirugía menor, ya que muestra la ventaja de una aplicación tópica que evita la infiltración subcutánea, la cual suele ser dolorosa para el paciente.

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2004-07-14   |   1,171 visitas   |   Evalua este artículo 1 valoraciones

Vol. 13 Núm.2. Abril-Junio 2003 Pags. 99-107 Oncología 2003; 13(2)