Fragmento

Hasta el lejano refugio de mi rincón natal, en Mérida, donde ahora me encuentro, me llega la infausta noticia de la sensible desaparición física de un mexicano ilustre por muchos conceptos, el doctor don Pedro Daniel Martínez, ejemplar profesional, filósofo, humanista, polémico expositor y maestro de muchas generaciones de médicos, enfermeras y otros trabajadores de la salud. No es fácil, en modo alguno, seguir la ruta entera del doctor Martínez a lo largo de su fecunda y productiva existencia, que discurrió por tantos y tantos senderos de nuestra patria mexicana, y aún por otros rumbos y latitudes del planeta. Desde el momento mismo de su recepción profesional de médico cirujano (a muy temprana edad por cierto), muestra una definida y auténtica vocación e interés por los lacerantes problemas sociales y de salud de los pobres, los desposeídos y marginados, de manera muy particular, por los componentes de ese enorme sector de población más vulnerable constituido por las madres y los niños.

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2004-07-22   |   341 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 53 Núm.1. Enero 1996 Pags. 51 Bol Med Hosp Infant Mex 1996; 53(1)