Autores: Vargas Quintero Humberto, Anaya Vallejo Sergio
La fractura estallamiento de las vértebras toracolumbares, es una patología que deja secuelas de incapacidad prolongada o permanente con el subsecuente desarrollo de problemas psicológicos, sociales y económicos para quien la padece y sus familiares. El tratamiento de estas fracturas, es muy diverso, en el presente estudio se buscó eliminar la deformidad residual y la estabilidad de la columna, mediante la colocación de un injerto óseo transpedicular. Se revisaron 20 pacientes con edades comprendidas entre los 17 y 70 años, 14 hombres y 6 mujeres. El 70% de ellos, con el antecedente traumático de una caída de altura, el 20% por atropellamiento y un 10% por aplastamiento con material pesado. Después de la cirugía el promedio de corrección inmediata fue de 12 grados y a los 3 meses de 11.5 grados. La recuperación neurológica fue satisfactoria, no se presentaron complicaciones neurológicas, infecciosas o por fallas técnicas. La consolidación de las fracturas se observó de las 16 a las 20 semanas, la movilidad se recuperó en el 95% de los casos, en forma total, el dolor fue mínimo y se quitó totalmente con terapia física y rehabilitación, la estabilidad fue completa. Las ventajas de este injerto óseo transpedicular, son: logra la reducción del colapso vertebral, rellena todos los espacios muertos, promueve la osteogénesis, restituye la capacidad de carga del cuerpo vertebral, logra la estabilidad de la columna, previene deformidades, recobra la altura del cuerpo vertebral, reduce la pared posterior y con esto la disminución del canal medular. Es la mejor solución para tratar pacientes en edad avanzada.
Palabras clave: Fractura vértebras toracolumbares injerto óseo.
2004-08-31 | 1,688 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 10 Núm.6. Noviembre-Diciembre 1996 Pags. 263-271 Rev Mex Ortop Traum 1996; 10(6)