Fragmento

Estamos asistiendo a esta solemne sesión, con el objeto de dar inicio a las actividades científicas del sexagésimo tercer año de nuestra corporación. Son estos mismo años de nuestra historia, en los que la medicina mundial y mexicana se han desarrollado vertiginosamente y han sufrido una enorme transformación, en especial la cirugía como arte y como ciencia, haste ser considerarda no sólo una artesanía por la habilidad del cirujano, sino el complejo conjunto del conocimiento de las ciencias básicas, de la tecnología, de la fisiopatología y del arte que representa la diéresis, la disección, la resección o reconstrucción y la síntesis. En ese tiempo nuestro país ha desarrollado, desde ser un campo de luchas de la época posrevolucionaria, hasta llegar al México actual, aún con múltiples problemas sin resolver, pero que se ha dado a la difícil tarea de crear sus instituciones, en beneficio de la sociedad y de la salud del pueblo mexicano. Clásicamente la misión del médico ha sido de preservar y restaurar la salud; y así antes, en otros siglos, se mezclaba la tendencia a sus deificación por la sociedad en que vivía, con la marginación, al considerar al cirujano al nivel de un barbero, en la actualidad su influencia en el ambiente social ha crecido, sigue y seguirá creciendo.

Palabras clave:

2004-09-10   |   713 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 64 Núm.2. Marzo-Abril 1996 Pags. 61-62 Cir Ciruj 1996; 64(2)