Fragmento

En el siglo XVI, fue construida la iglesia de San Pablo a instancias de Fray Pedro de Gante y perteneció a la Cofradía de los Franciscanos; más tarde fue cedida al Arzobispado de la Ciudad y Fray Alonso de la Veracruz, Arzobispo de México, fundó el Colegio de los Agustinos. ¿Qué oyó nuestro pueblo el día de los augurios? con voz estentórea lo dice el poeta: A los renuevos cuyos aliños un viento helado marchita en flor, también se suman los muertos y los heridos en Tacubaya, Padierna y Churubusco ante las balas del invasor en el año de 1847. No habiendo un lugar para atender a los heridos procedentes de los campos de batalla, el gobierno dispuso improvisar un hospital de sangre en el colegio de los Agustinos. El Lic. José Urbano Fonseca, regidor del ayuntamiento de México; el cura coadjuntor de la iglesia y además doctor en medicina don Ladislao de la Pascua; el Dr. Guillermo Santa María; el practicante Gutiérrez y las hermanas de la Caridad, a la cabeza de ellas Sor Micaela de Ayans, entraron para siempre como figuras relevantes de la historia al fundar esta querida Institución. Retirado el invasor quedó habilitado el recinto como Hospital Municipal, asignándole para ésto, sesenta camas: cuarenta para hombres y veinte para mujeres.

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2004-10-27   |   899 visitas   |   1 valoraciones

Vol. 62 Núm.3. Julio-Septiembre 1995 Pags. 42 Rev Hosp Jua Mex 1995; 62(3)