Fragmento

Un tema muy candente en nuestro medio son los falsos especialistas, que se han incrementado en el ejercicio de la medicina, particularmente en la dermatología, tal vez por considerarla una especialidad de fácil abordaje. Los abusos que se han multiplicado en nuestra especialidad son evidentes, éstos se dan por médicos generales, o médicos que han realizado una corta estancia en instituciones de entrenamiento dermatológico, o por personas sin preparación médica que anuncian para dar consulta dermatológica o para realizar procedimientos cosméticos. Peor aún son las clínicas de belleza que se atreven a realizar dermoabrasiones químicas, implantes de materiales de relleno y otros procedimientos que implican riesgos y que causan severas complicaciones que hemos visto en los enfermos, quienes finalmente llegan a los hospitales especializados y/o consultorios dermatológicos. Hasta la televisión y otros medios publicitarios incurren en estos abusos anunciando despigmentantes, revitalizantes, rejuvenecedores, productos para evitar la caída del pelo, antiarrugas, contra la celulitis, etc. Por cierto nada baratos, dudosa seguridad y muy cuestionables resultados.

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2002-12-17   |   757 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 10 Núm.1. Enero-Abril 2001 Pags. 5. Rev Cent Dermatol Pascua 2001; 10(1)