Autor: Sánchez Basurto Carlos
En 1971, en la Universidad de Wisconsin, el profesor de oncología Van Rennselaer Potter fue quien por primera vez utilizó el término bioética para designar “el estudio de los problemas éticos que a través de las ciencias intervienen directamente en la vida humana”. Su experiencia con pacientes que padecían cáncer lo había llevado a observar cómo de pronto un hombre en la cumbre de su vida, la ciencia o la economía, puede caer en el abismo de la enfermedad frente al envilecimiento y muchas veces humillación a la vista de la sociedad, de la familia y de sus médicos. En la actualidad somos testigos del olvido de los principios fundamentales del paradigma médico, su sentir y su actuar. Mediante la mercadotecnia y el mercantilismo, la deshumanización de la profesión ha llevado al médico, desde su formación y a través de su práctica, al despojo de sus principios hipocráticos, soslayando la voluntad de servicio, la abnegación y el respeto a la vida humana.
2004-11-22 | 1,638 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 72 Núm.5. Septiembre-Octubre 2004 Pags. 355-356 Cir Ciruj 2004; 72(5)