Fragmento

Es bastante frecuente escuchar a los pacientes comentar que el médico que les informó el diagnóstico lo hizo de una manera que describen como “insensible”, “fría”, “brutal” o incluso “cruel”. No exageramos si decimos que el instante de recibir el diagnóstico marcará la relación del paciente con su tratante. Se convertirá en un vínculo duradero –si la actitud del médico fue acertada– o marchará hacia el rechazo del enfermo hacia su doctor, y por tanto, hacia todo lo que éste le plantee como opciones de tratamiento. Muchas búsquedas de “segundas opiniones” son simplemente el resultado de una información suministrada abruptamente. Sabemos que el ambiente hospitalario no es, por lo general, el más propicio para dar una mala noticia. Basta pensar en la escasa privacidad, el exceso de trabajo y por ende, el corto tiempo disponible para dedicar a cada persona que recurre a la asistencia profesional, para darnos cuenta de las dificultades que confronta el médico cuando tiene que informar un diagnóstico desfavorable.

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2004-11-30   |   769 visitas   |   1 valoraciones

Vol. 16 Núm.3. Julio-Septiembre 2004 Pags. 175-177 Rev Venez Oncol 2004; 16(3)