Presentado en la XVIII Reunión Nacional de Medicina Crítica y Terapia Intensiva, Monterrey, Nuevo León Desde la Segunda Guerra Mundial el desarrollo acelerado de la tecnología ha hecho posible conservar y prolongar la vida y también las funciones de los pacientes en estado crítico. Las unidades de terapia intensiva cuentan con médicos especializados, enfermeras, personal técnico y equipo de monitoreo que permite efectuar intervenciones para salvar la vida, pero su desarrollo es paralelo al desarrollo científico y tecnológico. Los avances tecnológicos son tales que se puede prolongar la vida por largos periodos de tiempo. Las implicaciones éticas, religiosas, políticas y económicas son profundas. El intensivista tiene la oportunidad maravillosa de establecer un contacto personal, humano y profundo con algunos pacientes.
Palabras clave: Ciencia tecnología humanismo.
2005-01-24 | 1,362 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 9 Núm.4. Julio-Agosto 1995 Pags. 124-128 Rev Asoc Mex Med Crit Ter Int 1995; 9(4)