Antecedentes de la sustancia P y su acción en la cavidad bucal

Autores: López Elizarraráz Bárbara, Aldape Barrios Beatriz Catalina

Fragmento

Se han realizado diversas clasificaciones del dolor, pero básicamente podemos definir dos tipos: dolor agudo (< 6 meses) y dolor crónico (> 6 meses). El dolor agudo se percibe 0.1 segundos después del contacto con el estímulo doloroso; el impulso nervioso generado viaja hacia el sistema nervioso central a través de fibras de una alta velocidad de conducción. Dura segundos, minutos o incluso días y generalmente desaparece cuando la afección que lo origina llega a término. La mayor parte de las veces es producido por estimulación nociva, daño tisular o enfermedad aguda; el dolor agudo casi no se percibe en algún tejido profundo del organismo. Por su parte, el dolor crónico tarda un segundo o más en aparecer y aumenta lentamente su frecuencia e intensidad durante segundos, minutos o varios días, persiste más allá del tiempo razonable para la curación de una enfermedad aguda, por lo que se le asocia con un proceso patológico crónico que provoca dolor continuo; se relaciona con las estructuras profundas del cuerpo, no está bien localizado y es capaz de producir un sufrimiento continuo e insoportable. Otra modalidad para clasificar el dolor es de acuerdo a la presencia de dos vías para la conducción de los impulsos dolorosos (lenta y rápida). Esta clasificación explica la observación fisiológica de la existencia de dos tipos de dolor. Un estímulo doloroso produce una sensación precisa y localizada seguida de una sensación sorda, difusa y desagradable. El dolor rápido se ha asociado con las fibras tipo A y el de tipo lento con las fibras C.

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2005-05-18   |   929 visitas   |   Evalua este artículo 1 valoraciones

Vol. 3 Núm.8. Abril 2005 Pags. 21-24 Dol Clin Ter 2005; III(8)