Autores: Rudd Patricia A, McNeill Charles
Las condiciones músculo-esqueléticas que afectan a la mandíbula (DTM) son la mayor causa de dolor no odontogénico en la región orofacial. Éstas incluyen desórdenes de los músculos masticatorios (no articular) y desórdenes de la articulación temporomandibular (articular). Como en otras alteraciones músculo-esqueléticas, los síntomas de la mandíbula aumentan y menguan. Aunque no constituyen una amenaza para la supervivencia, pueden deteriorar la calidad de vida significativamente. Se definen como una colección de desórdenes músculo-esqueléticos bastante dispares (no articulares o articulares) que afectan a la mandíbula, pero que a menudo tienen los mismos signos y síntomas. Las afecciones de los músculos masticatorios incluyen dolor miofascial, tendinitis, miositis, mioespasmo o trismus, contractura y neoplasia. El dolor miofascial está caracterizado por un dolor muscular sordo, regional o local, que aumenta con la función mandibular, el rango de movimiento o por provocación. Clínicamente, hay bandas tensas a la palpación, con la presencia de sitios dolorosos localizados o puntos gatillo en el músculo, tendón o fascia. Aunque algunas definiciones de dolor miofascial requieren el criterio de inclusión de dolor referido, en la mayoría de la literatura se sugiere que este dolor puede o no ser referido a un sitio distante, como los dientes, oídos o cabeza. El dolor miofascial no es considerado un proceso inflamatorio, sin embargo, la inflamación y/o la sensibilidad en los órganos tendinosos de los músculos masticatorios deben ser consideradas una fuente de incomodidad, como en otras áreas del cuerpo.
2005-09-07 | 1,458 visitas | 1 valoraciones
Vol. 3 Núm.11. Julio 2005 Pags. 15-19 Dol Clin Ter 2005; III(11)