Autores: Vázquez Mónica, Lartigue Becerra María Teresa, Cortés José
Antecedentes: Las investigaciones recientes han encontrado que los recién nacidos, hijos de madres con un trastorno del afecto, presentan desde el periodo neonatal un perfil de desajuste caracterizado por reactividad deficiente según la Escala de Evaluación de Conductas Neonatales de Brazelton; hipersomnia indeterminada; niveles elevados de hormonas asociadas al estrés (norepinefrina y cortisol); signos electroencefalográficos de activación de la zona frontal derecha; déficit en la reactividad a la expresión facial; tono vagal menor que implica la no reactividad de la respuesta simpática, etc. La conducta de las madres en la relación con sus recién nacidos se caracteriza por dos estilos de interacción predominantes: un estilo de retraimiento y otro de intrusión, los cuales parecen tener un efecto diferencial negativo en sus infantes debido tanto a la estimulación inadecuada como a la falta de modulación de la excitación emocional. La depresión y la ansiedad de la madre con sus implicaciones bioquímicas pueden afectar al producto, debido a su exposición al desequilibrio bioquímico materno. Objetivos: Comparar los sistemas de organización conductual, de un grupo de lactantes, hijos de madres deprimidas, en contraste con los hijos de madres sin evidencia de psicopatología. Método: La investigación de casos y controles, anidados en una cohorte, es un estudio longitudinal analítico y prospectivo para el cual se seleccionó una muestra de 53 mujeres de entre 18 y 40 años de edad, con 16 a 35 semanas de gestación, de las cuales 24 no presentaron evidencia de psicopatología, con un promedio de edad de 27.7 ± 5.3, y otra muestra de 29 mujeres con trastorno del estado de ánimo con una edad promedio de 30 ± 6.7; las medias de edad gestacional al nacimiento fueron de 39.4 ± 1.3 y 39.1 ± 1.2 respectivamente. Este estudio se realizó durante el periodo de junio de 2003 a junio de 2004 con el consentimiento por escrito de las madres de los recién nacidos. En dicho estudio se aplicó la Escala de Conductas Neonatales de Brazelton (NBAS por sus siglas en inglés) (un instrumento indicador de la existencia o no de alteraciones que se aplica en los primeros dos meses después del nacimiento) en dos ocasiones a los 53 bebés de dichas mujeres, la primera a los tres días y la segunda entre los 27 y los 30 días del nacimiento. A las mujeres se les aplicó la Escala de Depresión Perinatal de Edimburgh y la Entrevista Clínica Estructurada para los ejes I y II del DSM IV para su asignación a los grupos (con trastorno del estado de ánimo y sin psicopatología). Las comparaciones se efectuaron por medio del análisis de covarianza (ANCOVA) utilizando como variable independiente los grupos de diagnóstico, como variable dependiente el cambio pretest-postest en el NBAS y como covariables los valores basales en dicha prueba, el intervalo en días entre evaluaciones y las semanas de gestación. Este análisis se hizo para cada uno de los seis conglomerados o segmentos del NBAS; es decir, interacción social, sistema motor, organización de estados, regulación de estados, sistema autónomo y grupo de reactivos suplementarios, así como para la puntuación total. Resultados: El desempeño en la primera evaluación con el NBAS de los bebés de ambos grupos fue satisfactorio, lo que indica que los bebés al nacimiento están en buenas condiciones para su desarrollo. En la segunda aplicación de los seis conglomerados analizados sólo se encontró una diferencia estadísticamente significativa en el conglomerado del sistema motor, donde los bebés de madres con patología mostraron una menor maduración (media ajustada 0.971 ± 2.6 puntos) en comparación con los bebés de las madres sin psicopatología (media ajustada 2.033 ± 2.6 puntos) [F(1.49) = 3.83, p = 0.05]. En el resto de los segmentos del NBAS los bebés no presentaron un cambio estadísticamente significativo. En general se observó que, sin considerar las covariables, la maduración resultó favorable para el grupo de madres sin psicopatología. Conclusiones: La organización conductual de los bebés de madres deprimidas tiende a tener un menor desarrollo en el área de maduración motora; si bien no se encontró evidencia de un menor desarrollo en los demás conglomerados se pudo observar una tendencia en este aspecto. Es importante profundizar en el estudio del efecto de la depresión materna en el desarrollo de la organización conductual de los neonatos.
Palabras clave: Depresión materna neonatos Brazelton.
2006-01-17 | 1,835 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 28 Núm.5. Octubre 2005 Pags. 11-19 Salud Ment 2005; 28(5)