Nuevos disruptores endocrinos:

su importancia en la población pediátrica 

Autores: Román González Alejandro, Alfaro Velásquez Juan Manuel

Resumen

Los cambios de nuestro hábitat en los últimos 40 años han generado contactos frecuentes con sustancias químicas tanto naturales como sintéticas que funcionan como disruptores endocrinos; son ejemplos los pesticidas ampliamente usados tras la introducción del DDT, los derivados petroquímicos en la industria del plástico, las medicinas sintéticas, y el volumen creciente de artículos de vestuario, aseo, cosmética y transporte. En cada uno de los grupos anotados hay señales de actividad de algún disruptor endocrino sea directamente o a través de sus derivados. La controversia inicial se centró principalmente en los compuestos químicamente similares a los estrógenos y en todos aquellos con actividad antiandrógenos o antitiroidea, debido a que se sospechaba que dañaban el ADN; recientemente se han estudiado otros compuestos y condiciones de vida que no lesionan el genoma pero sí interactúan con enzimas y sus metabolitos. Entre los efectos potenciales de estas sustancias cabe mencionar los siguientes: anomalías intrauterinas por daños del tejido fetal en formación; cambios del fenotipo genital al nacer y diversas manifestaciones clínicas durante la adolescencia; además, no pueden perderse de vista los efectos sobre las generaciones futuras. Los disruptores endocrinos son compuestos que pueden modular tanto la expresión endocrina e inmune del afectado como la homeostasis, la reproducción, el desarrollo y el comportamiento y tienen efectos sobre los tejidos reproductivos masculino y femenino, la fertilidad, la función tiroidea y el sistema nervioso central.

Palabras clave: Disruptores endocrinos estrógenos xenobióticos.

2006-02-04   |   1,992 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 18 Núm.4. Diciembre 2005 Pags. 446-456 IATREIA 2005; 18(4)