“La pandemia de gripe inquieta a Washington”. Así titula la Revista Science una breve nota el 14 de octubre pasado, en ella informa de la agitación en la actividad política de la Casa Blanca ante el reporte de una epidemia de aves acuáticas en Rumania, pues las pruebas inmunológicas hacen sospechar que se trata de influenza; casi al mismo tiempo ocurrió en Turquía la muerte de 1,700 pavos por un virus H5: en ambos casos el diagnóstico definitivo está en proceso. Una semana antes, el 7 de octubre, el Presidente Bush se había reunido con representantes de las industrias fabricantes de vacunas para conocer la factibilidad de producir 600 millones de dosis, mientras que su Secretario de Salud y Servicios Humanos había acordado ya, con representantes de 80 países, cómo sumar esfuerzos para enfrentar este problema. Al fin, después de muchos llamados hechos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), parece que tuvieron respuesta; aunque ayer 17 de octubre, según informes periodísticos parece que la muerte de pavos en la isla griega de Kios, de comprobarse que el responsable es el virus de la influenza H5N1, puede decirse que la gripa aviaria está ya en Europa. Tal parece que el vaticinio de una pandemia por esta enfermedad está concretándose en hechos, aunque todavía no alcanza la última meta: mutar para salvar la barrera natural que impide llegar al hombre y que éste contagie a otro ser humano; por eso es pertinente revisar los argumentos en que se fundamentan los presagios, nada optimistas, de que esto ocurra.
Palabras clave: Pandemia diagnóstico en proceso Europa.
2006-03-04 | 716 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 72 Núm.5. Septiembre-Octubre 2005 Pags. 219-220 Rev Mex Pediatr 2005; 72(5)