Introducción El tratamiento de los tumores malignos se basa en el empleo aislado o en combinación de cirugía, radioterapia y quimioterapia, y en algunos tumores concretos, de tratamientos hormonales e inmunológicos. En general, el primer tratamiento que se lleva a cabo en un paciente con cáncer es el que tiene un mayor impacto sobre la historia natural de la enfermedad y por tanto sobre su supervivencia y calidad de vida. De todos modos, teniendo en cuenta los efectos secundarios que pueden derivarse de estos tratamientos, cualquier decisión terapéutica que se tome en el transcurso de la enfermedad de estos pacientes pueden repercutir significativamente en su calidad de vida.
2006-05-27 | 908 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 100 Núm.4. Octubre-Diciembre 2003 Pags. 133-138 Gac Med Bilbao 2003; 100(4)