Autor: Escobar Izquierdo Alfonso
El cuerpo humano funciona como un todo, conformado por aparatos y sistemas que constituyen el conjunto de estructuras de cuyo funcionamiento armónico depende ese estado que se denomina salud y que, en sí, da origen a la homeostasis corporal. Todos los órganos, aparatos y sistemas son importantes para mantener la homeostasis; ninguno puede ser considerado menos importante o valorado como el más importante. Se ha dicho, y se dice, que el cerebro es el órgano más importante del cuerpo humano, que su integridad funcional otorga a la especie humana la capacidad de pensar, de crear, de comunicarse con sus semejantes, y otras manifestaciones de sus actividades que al Hombre lo hacen humano y que adornan a los miembros de la comunidad humana. ¿Pero, nos ha dicho alguien ¿que el buen funcionamiento del cerebro depende de que los otros órganos funcionen bien? Basta sólo mencionar algunos ejemplos de disfunción orgánica: ¿Qué ocurre si se altera el latido rítmico del corazón? Como en la fibrilación ventricular, la más peligrosa disritmia cardiaca, con la cascada de disfunción circulatoria que desencadena, o, si se va al extremo ¿qué ocurre si el corazón deja de latir, con restitución ulterior? La respuesta es obvia, la función del cerebro se deteriora o se pierde, parcial o totalmente; lo último se denomina muerte cerebral.
2006-07-21 | 351 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 18 Núm.1. Enero-Marzo 2005 Pags. 38-42 Rev Inst Nal Enf Resp Mex 2005; 18(1)