Las funciones corticales superiores y su importancia en Odontología

Autor: Danielson Jeremy

Fragmento

La corteza también es sustrato para las funciones de comprensión, consciencia y comunicación. El lenguaje, comprensión y comunicación de ideas abstractas, son actividades corticales separadas de los mecanismos neurales relacionados con las funciones primarias visual, auditiva y motora. La corteza motora (área 4) está conectada a los núcleos motores del tallo encefálico (nervios craneales: V trigémino, VII facial, IX glosofaríngeo, X neumogástrico o vago y XII hipogloso) y participa en la generación del habla. La corteza motora supletoria (área 6) se encarga de los mecanismos de secuencia y coordinación de sonidos. La habilidad de pensar las palabras correctas, programar y coordinar la secuencia de contracciones musculares necesarias para producir sonidos inteligibles, y para ensamblar palabras hacia oraciones significativas, depende de la corteza de asociación frontal (área de Broca, áreas 44 y 45) dentro de la circunvolución frontal inferior, o tercera, localizada justo anterior a la corteza motora que controla los labios y la lengua. La habilidad para comprender el lenguaje, incluso el habla, depende del área de Wernicke localizada en la parte posterior de la circunvolución temporal superior dentro de la corteza de asociación auditiva (área 22). El fascículo longitudinal superior (arqueado) proporciona una vía de asociación crucial dentro de la sustancia blanca del hemisferio, al conectar las áreas de Wernicke y de Broca. Puesto que el fascículo arqueado conecta el área de comprensión del habla (área de Wernicke) con la que se encarga de la producción del habla (área de Broca), la lesión de este fascículo de sustancia blanca produce deterioro de repetición. La disartria, trastorno en el cual el mecanismo para hablar está dañado debido a lesiones en las vías corticobulbares, puede deberse a lesiones en todos los niveles, desde la corteza motora hacia abajo; en uno o más núcleos de los nervios craneales; en el cerebelo o en los músculos que producen los movimientos que permiten el habla. La disartria se caracteriza por disfunción de los siguientes aspectos del habla: fonación, articulación, resonancia o respiración. Las vías intermedias comprenden los ganglios basales, el cerebelo, el tronco del encéfalo, los pares craneales y las uniones neuromusculares. El conocimiento de estas vías permite identificar el lugar de la lesión. En el diagnóstico diferencial de la disartria, no existe dificultad para la comprensión o expresión del lenguaje hablado, al contrario de lo que sucede con la disfasia.

Palabras clave: Funciones de comprensión consciencia y comunicación.

2006-08-16   |   18,278 visitas   |   5 valoraciones

Vol. 2 Núm.24. Julio 2006 Pags. 12-13 Odont Moder 2006; 2(24)