Autores: Velázquez Velasco Julio Rafael, Vilchis Nava Pablo, Nevarez Bernal Roberto Armando, Kably Ambe Alberto
Cuando se coloca un dispositivo intrauterino (T de cobre 380, DIU) pueden perforarse, en casos extremos, órganos vecinos como la vejiga, el intestino delgado, el rectosigmoides y el apéndice. Una vez realizado el diagnóstico, se debe proceder de inmediato a la extracción del dispositivo. En este artículo se comunica el caso de una paciente de 33 años de edad, a quien el dispositivo intrauterino le perforó el útero de forma completa, antes de migrar hacia el yeyuno y penetrar, por invaginación-evaginación, hacia la luz intestinal. El dispositivo se le había colocado tres meses después de su tercera cesárea. A los 90 días acudió a consulta debido a una opsomenorrea, pero no refirió otro síntoma. Durante la revisión no se localizaron las guías del dispositivo, por lo que se le efectuó un ultrasonido vaginal, aunque tampoco se observó el DIU en la cavidad uterina. Se tomó entonces una radiografía del abdomen y una tomografía axial computada, mediante las cuales se corroboró la traslocación del mismo. Se determinó la realización de una histeroscopia-laparoscopia con estudio de fluoroscopia durante el periodo transquirúrgico. El dispositivo se localizó dentro del asa intestinal y se extrajo con entero-entero anastomosis del yeyuno. Este caso es un ejemplo de que la colocación de un dispositivo intrauterino no es inocua y que puede afectar gravemente a los órganos vecinos.
Palabras clave: Perforación uterina y de yeyuno dispositivo intrauterino.
2006-11-14 | 2,726 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 74 Núm.8. Agosto 2006 Pags. 435-438 Ginecol Obstet Méx 2006; 74(8)