Resumen

La ruptura de un quiste aracnoideo que cause un higroma subdural es rara. Se han publicado veintiún casos en la literatura. Presentamos el caso de un niño de 9 años, con signos de hipertensión intracraneal, debido a la ruptura de un quiste aracnoideo tipo III, que da lugar a un higroma subdural. Se describen los hallazgos clínicos y radiológicos, así como la conducta a seguir, en relación con la literatura perntinente.

Palabras clave: Quiste aracnoideo complicaciones resonancia magnética higroma subdural.

2007-04-05   |   2,392 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 15 Núm.1. Enero-Febrero 2004 Pags. 72-75 Neurocirugía 2004; 15(1)