Deformidad craneana

Su importancia en la pediatría general 

Autores: Portillo Santiago, Konsol Omar, Pico Pedro

Fragmento

Introducción El pediatra necesita poder diferenciar las craneosinostosis verdaderas que requieren tratamiento quirúrgico de aquellas deformidades posicionales, como por ejemplo, la deformidad occipital observada en recién nacidos, con mayor prevalencia a partir de 1992, cuando por indicación de la Academia Americana de Pediatría, se recomendó a los padres que los niños deberían dormir en posición supina, a fin de disminuir la incidencia del síndrome de muerte súbita infantil. Esta deformidad requiere poco manejo, pero implica la necesidad de calmar la preocupación de los padres. Asimismo, deberá saber diferenciar las verdaderas sinostosis congénitas de aquellas adquiridas, como la que presentan los pacientes que poseen sistemas de derivación para la hidrocefalia. Para lograr esto, es necesario saber cuáles son los estudios diagnósticos (radiografías de cráneo y tomografía computada), el momento y la indicación precisa de cada uno, así como el conocimiento de las suturas craneanas normales.

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2007-04-19   |   1,241 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 102 Núm.3. Mayo-Junio 2004 Pags. 190-202 Arch Argent Pediatr 2004; 102(3)