Las residencias médicas

Fragmento

Sr. Editor Después de leer con gran interés el artículo de los Dres. Gomila y col. (Arch. argent. pediatr 2003; 101: 171-175), donde relatan la historia de 32 años de residencia en Pediatría del Hospital de Niños de Córdoba, se me ocurrió la siguiente reflexión general sobre el modelo. La formación de un profesional cuya actividad se basa en las ciencias fácticas y el arte de las relaciones personales no puede hacerse de otra manera que a partir de la experiencia vital del acto profesional. Probablemente la medicina asistencial sea el paradigma de este hecho. Sin embargo, a partir de su graduación, el médico enfrenta dos situaciones cronológicamente distintas. Primero debe adquirir destrezas, organizar su pensamiento y aprender a usar los conocimientos como herramientas. Al mismo tiempo, debe ir actuando paulatinamente con mayor responsabilidad individual en decisiones que tienen que ver con la salud de seres humanos. Todo esto en medio de un veloz aumento de contenidos que hacen rápidamente obsoleto lo que creyó aprender en el grado, convertido en estanques que no se comunican entre sí y no renuevan su agua.

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2007-04-23   |   1,392 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 102 Núm.1. Marzo-Abril 2004 Pags. 75-79 Arch Argent Pediatr 2004; 102(1)