Editorial

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La mayoría de las bacterias que constituyen la flora humana normal es anaerobia. Cuando se desplazan de sus sitios normales hacia el interior de tejidos o aberturas corporales, los anaerobios pueden producir enfermedades. La bacteriemia consiste en la intoxicación de la sangre por la presencia de bacterias en la misma. Al desorganizarse temporalmente las defensas naturales en torno a una infección, puede ocurrir que las bacterias invadan la corriente sanguínea, provocando así la bacteriemia. La importancia de los estreptococos orales y otros organismos de la cavidad bucal en la patogénesis de la endocarditis está bien documentada. Cerca de 45% de los casos de endocarditis comprobados microbiológicamente es causado por estreptococos orales, de los cuales existen más de 16 especies según una clasificación reciente. Durante una bacteriemia, los estreptococos B hemolíticos, neumococos u otras bacterias pueden depositarse sobre válvulas cardiacas normales o con deformaciones, lo que genera una endocarditis .La endocarditis infecciosa (EI), una de las infecciones más graves que existe, se caracteriza por la colonización o invasión de las válvulas cardiacas o del endocardio mural por un agente infeccioso, que da lugar a la formación de vegetaciones friables cargadas de microorganismos, las denominadas vegetaciones bacterianas. Autores como Robbins establecen, sin duda, que la EI está relacionada con la infección bucal, ya que en la mayor parte de los casos existe una estrecha similitud entre el agente etiológico de la enfermedad y los microorganismos que se encuentran en la cavidad bucal, en la pulpa dental y en las lesiones periapicales; además, se han observado síntomas de EI subaguda poco después de las infecciones dentarias. De los factores que favorecen la EI, el más importante es el paso de los microorganismos a la sangre. El inicio de la bacteriemia está ampliamente considerado en aquellos procedimientos dentales que conduzcan a un sangrado. La vía de entrada de los agentes puede ser manifiesta, como ocurre cuando hay una infección en otra localización, la drogadicción intravenosa o un procedimiento quirúrgico o dental previo, los cuales pueden originar bacteriemias transitorias. Aunque la bacteriemia es común tras ciertos procedimientos invasivos, sólo algunas bacterias causan endocarditis.

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2007-05-03   |   877 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 1 Núm.8. Octubre-Diciembre 2006 Pags. 1 Rev Mex Odon Clín 2006; 1(8)