Autores: Calderón Rivera Jaime Salvador, Rosas Vargas Miguel Ángel, Mejía Rodríguez Silvia Anett, Moncada Alcon Abel Marcelo, Del Río Navarro Blanca Estela, Sienra Monge Juan José Luis
La dermatitis atópica es un proceso inflamatorio que se distingue por alteraciones cutáneas de morfología y distribución típicas, con prurito intenso de predominio nocturno, evolución crónica recidivante, de carácter estacional, con antecedentes familiares y personales de atopia. En la piel genéticamente predispuesta, seca e hipersensible, actúan factores inmunitarios y de otros tipos que generan reacciones anormales a múltiples estímulos endógenos y ambientales. El diagnóstico es clínico y generalmente se logra por un grupo de signos y síntomas conocidos como criterios de Hanifin y Rajka. Los pacientes con dermatitis atópica pueden tener signos clínicos típicos, o bien, variedades mínimas y localizadas, consideradas estigmas de constitución atópica. En algunos pacientes pueden verse variantes clínicas y morfológicas con sitios especiales de localización, denominadas variedades atípicas de la dermatitis atópica. La identificación de éstas permite hacer el diagnóstico diferencial y establecer el diagnóstico de la enfermedad para iniciar el tratamiento.
Palabras clave: Dermatitis atópica formas típicas formas atípicas.
2007-06-11 | 2,513 visitas | Evalua este artículo 0 valoraciones
Vol. 54 Núm.3. Mayo-Junio 2007 Pags. 96-103 Rev Alergia Mex 2007; 54(3)