Fragmento

Si una enfermedad puede ser tratada médicamente o bien con terapia invasora, ¿cómo debe ser escogido alguno de estos dos tratamientos? Una opción racional debe ser basada en la presencia de al menos estas cinco características de las opciones de tratamiento: eficacia en la cicatrización de las lesiones causadas por el reflujo gastroesofágico, eficacia en la prevención de complicaciones, seguridad y efectos adversos, conveniencia y costos. La gravedad de la enfermedad es otro factor importante que debe ser tomado en cuenta en esta decisión, especialmente cuando se escoge entre tratamientos potencialmente dañinos. Por otro lado, ¿cómo escogemos entre la terapia médica y la terapia quirúrgica para la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE)? La enfermedad por reflujo gastroesofágico ha sido establecida como un factor de riesgo importante para el esófago de Barrett y el adenocarcinoma de esófago, un tumor que ha casi cuadruplicado su frecuencia en los Estados Unidos en las últimas décadas. Numerosos reportes en televisión, periódicos y revistas han alertado al público de la asociación entre la ERGE y el cáncer de esófago. La preocupación acerca de este riesgo de cáncer indudablemente ha contribuido al creciente uso de tratamiento invasivo como la funduplicatura y los procedimientos endoscópicos antirreflujo en una era en la que el tratamiento médico para la ERGE se encuentra en su mejor momento. Una opción racional entre las distintas terapias antirreflujo requiere una revisión crítica de su respectivo impacto en los cinco aspectos generales identificados anteriormente y un establecimiento objetivo de los verdaderos riesgos de la ERGE.

Palabras clave: ERGE esófago de Barrett adenocarcinoma de esófago.

2007-10-29   |   2,343 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 72 Núm.2. Noviembre 2007 Pags. 13 Rev Gastroenterol Mex 2007; 72(Supl. 2)