Tratamiento del dolor en artritis reumatoide

Autores: Pérez Bastidas María Esther, Espinosa Morales Rolando

Fragmento

De las enfermedades músculo-esqueléticas, la artritis reumatoide (AR) es la enfermedad inflamatoria autoinmune más frecuente y afecta entre el 1 y 2% de la población mundial. La etiología de la AR es desconocida; se cree que el paciente tiene susceptibilidad genética (HLA-DR4, HLA-DR1) y que ciertos factores ambientales influyen en su expresión (infecciosos, hormonales, tabaquismo). El tejido sinovial es el órgano blanco principal en este padecimiento; la inflamación y el dolor articular son los signos y síntomas que predominan en la presentación clínica. Sin embargo, otros órganos y sistemas pueden afectarse –manifestaciones extraarticulares–. Debido a estos síntomas articulares y extraarticulares, la AR es considerada una enfermedad sistémica. Los criterios del Colegio Americano de Reumatología (CAR) son útiles para clasificar como enferma de AR a una persona que tenga manifestaciones clínicas, de laboratorio y gabinete; no obstante, en las etapas iniciales de la AR los individuos pueden no cumplir con estos criterios aunque tengan el padecimiento. La AR se caracteriza clínicamente por poliartralgias, poliartritis de grandes y pequeñas articulaciones, patrón de afección simétrica y rigidez articular de más de 30 minutos con predominio matinal; radiológicamente tiene erosiones y destrucción articular. Al principio de la enfermedad puede presentar diferentes patrones: monoarticular de lenta progresión, oligoarticular episódico, poliarticular de inicio abrupto y manifestaciones extraarticulares.

Palabras clave: Artritis reumatoide tratamiento.

2007-11-07   |   2,404 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 5 Núm.3. Marzo-Abril 2007 Pags. 11-15 Dol Clin Ter 2007; V(3)