Fragmento

Es realmente interesante ver la evolución de los conceptos en el tiempo y a veces en el corto tiempo. Esta reflexión a propósito de los cambios que se viven en el ámbito de la medicina mexicana impregnada de eslóganes como “Calidad” en la atención médica, más y mejores explicaciones a los pacientes, CONAMED, SECODAM, Derechos Humanos, etc. Desde mi punto de vista es como construir un edificio de arriba hacia abajo. En realidad este concepto de la calidad ha sido heredado de países del primer mundo en donde los principios culturales básicos y la mentalidad de los que ejercen alguna área del conocimiento son seleccionados y dirigidos por gente de calidad que fue colocada en estos puestos a través de oposiciones curriculares en donde se demostró su aptitud y calidad. Es decir, el círculo de la calidad en donde la excelencia debe estar tanto en el que dirige como en el dirigido, situación que no siempre se da en nuestro ámbito. En realidad, el proceso aplicativo de altos estándares de calidad en un país en desarrollo es largo y complejo y hay que empezar por las bases. Desde mi muy particular punto de vista para que el médico tenga calidad en su actuar profesional debe contar primeramente con un bagaje de principios, educación y cultura general, además de que debe tener cubiertas sus necesidades elementales como soporte financiero suficiente para él y sus familiares, casa, sustento, vestido, diversiones y, desde luego, una vida sana y por ende un estado mental definido para dar lo mejor de sí.

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2003-01-08   |   1,243 visitas   |   1 valoraciones

Vol. 68 Núm.3. Julio-Septiembre 2001 Pags. 109-111. Rev Hosp Jua Mex 2001; 68(3)